Esta es la pregunta que pretende responder el equipo liderado por el Dr. Charles Perry en la Universidad de Tenesse (MTSU), EE.UU. Un interrogante que en su respuesta pretende ofrecer un sistema aftermarket para todos aquellos vehículos que pese a su tiempo de uso, todavían tienen un largo camino por delante y sus dueños quieren mejorar su eficiencia y su impacto ambiental. El secreto de esta interesante idea se basa en la posibilidad de instalar motores eléctricos en la propia rueda, por lo que a nivel teórico estaríamos ante un planteamiento aplicacble a cualquier vehículo.
El proyecto que ya ha presentado su primer prototipo está en este momento buscando inversores para poder transformar la idea en un desarrollo industrial a gran escala. Pese que a priori pueda parecer que son muchos los inconvenientes, el equipo que está desarrollando esta idea habla de que la instalación de los motores, el sistema de gestión y las baterías apenas requieren de modificaciones o cambios de envergadura.
¿Es suficiente con un único motor eléctrico?
El secreto de la alta simplicidad de instalación de este sistema de ruedas motorizadas, consiste en que el motor eléctrico como tal no necesita del total de espacio interior de la llanta, como si plantean otros diseños como el patentado por el fabricante Protean. En este caso se ubicarían un total de 40 electroimanes alrededor del tambor de la rueda, conservando el sistema convencional de frenos y empleando el espacio libre que existe entre el propio cierre del tambor y la llanta.
El primer prototipo ha sido instalado en un vehículo familiar de la marca Honda. Según las primeras estimaciones en los recorridos de prueba, la reducción del consumo alcanza porcentajes de entre el 50 y el 100% gracias a que el vehículo puede funcionar en modo completamente eléctrico. Cada uno de los motores entregaría 271 Nm de par, lo que aportaría un gran empuje y disponibilidad de respuesta para el entorno ideal de ejecución que serían los recorridos puramente urbanos.
Una oportunidad para convertir a híbrido enchufable nuestro vehículo
Diseño de ruedas motorizadas empleado por Protean en prototipos Brabus
Obviamente la mayor complicación del proyecto pasa por ubicar su sistema de baterías de Ion-Litio. Una alta necesidad de volumen que explican el uso de un vehículo con carrocería familiar, pero que según indican los artífices del invento, sería una necesidad que se reduciría drásticamente si el proyecto llegara a producción en serie. Pese a este factor condicionante de espacio, resalta un factor todavía más sorprendente, y es que el director del proyecto habla de que el precio objetivo de compra en el mercado se pretende fijar en 3.000 $, 2.473 € al cambio actual.
Datos como la potencia que son capaces de ofrecer sendos motores eléctricos, tiempos de carga o prestaciones no han trascendido por el momento. Aún así resulta bastante interesante este modo de entender la conversión de vehículos convencionales, pudiendo preservar la mecánica original, pero añadiendo una más que interesante ayuda eléctrica para los trayectos más cotidianos que a la vez son los que representan un mayor gasto.
Fuente: GreenCarCongress | MTSUNews
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