En un editorial publicado el pasado lunes en el New York Times, el periódico reconoce falta de criterio y falta de precisión en la polémica prueba del Model S y de la red de supercargadores Tesla que saltó a los titulares la semana pasada. Haciendo propia una crítica (de las miles recibidas) escrita por un lector, el periódico entona el mea culpa, aunque en un tono menor.
Todo comenzó cuando, en respuesta a la crónica de un viaje fallido por la costa este norteamericana realizado por un probador del N.Y.Times en un Tesla Model S, Tesla respondió publicando toda la telemetría del viaje que, básicamente, desmontaba la historia en sus puntos más importantes dejando al autor y a su crónica en un fuera de juego difícil de explicar. Y tan difícil, vamos.
En el editorial, que representa una respuesta oficial del medio a todos los efectos, el periódico reproduce una crítica escrita por uno de sus lectores en la que hace notar que:
* El probador no se leyó el manual de instrucciones, lo que habría hecho posible llevar el viaje a buen puerto de forma sencilla. No enchufó el coche durante la noche, no empleó el modo de máxima autonomía, no empleó el modo de máximo ahorro y no condujo el coche con ningún criterio de eficiencia, más bien todo lo contrario.
* No parece razonable que el probador argumente que la prueba se centraba en la red de recarga y no en el coche, cuando se ensaña con cada uno de los detalles del coche que no han ido bien en el viaje, recreándose en anécdotas y detalles de funcionamiento y prestando escasa atención a los puntos de recarga.
* No fue una buena idea por parte de Tesla proponer esta prueba tan al límite, precisamente en el momento más frío del año. Tienen su parte de culpa.
* El probador no utilizó el más mínimo sentido común para intentar llegar a su destino, lo que no nos deja más opción que pensar que estaba buscando la historia de un fracaso, más que una prueba objetiva e imparcial de la red de recarga o del coche.
Después de que un grupo de usuarios de la marca reprodujeran el mismo viaje durante este fin de semana (los fans de Tesla se las gastan así) la verdad es que quedan pocas dudas acerca de la capacidad del Model S de cubrir ese último tramo crítico que se le «atragantó» al probador del Times.
El periódico hace suya la crítica (que yo he reproducido en el recuadro resumida), con lo que parece admitir el error en su conjunto. Explícitamente, admite falta de criterio en sus decisiones y falta de precisión en sus notas (con respecto a la implacable telemetría de Tesla, claro). No obstante, niega cualquier mala fe por parte del periodista, en un intento de salvar los muebles en el último momento y dejarnos con una cierta duda sobre la intencionalidad por su parte.
Por lo que a mí respecta, a otro perro con ese hueso.
Fuente: Autobloggreen | New York Times
En Tecmovia: Tesla se enzarza con el N.Y.Times por supuestas falsedades en una prueba del Model S | Vehículo eléctrico: ventajas, inconvenientes y perspectivas de futuro [estado de la tecnología del automóvil]
