Honda continúa decidida en el desarrollo de una tecnología diseñada exclusivamente para limitar la aparición de situaciones de congestión. Centrándose en una posibilidad real de monitorización de nuestro estilo de conducción, un sistema virtual es capaz de analizar diferentes parámetros para asesorarnos sobre cómo debemos ejecutar nuestro trayecto para minimizar el consumo, evitando la aparición de situaciones de tráfico lento.
La máxima perseguida por Honda es conseguir el mínimo de variaciones posibles en velocidad durante el trayecto. Esta meta consigue ofrecer una velocidad media global que repercute en una mayor eficiencia del recorrido gracias a un menor uso de situaciones de paro y aceleración que finalmente dinamitan el consumo medio de cualquier vehículo. Un proyecto piloto llevado a cabo en Indonesia demuestra que el ahorro de combustible puede alcanzar hasta un 20%.
La clave reside en mantener una velocidad constante
En definitiva hablamos de una condición obvia para el correcto flujo del tráfico, todo trata finalmente de que los usuarios implicados conserven unas mismas condiciones de velocidad para que no comiencen a entorpecerse los unos a los otros. Esto es lo que dice la teoría, demostrada en no pocas ocasiones, el problema surge a la hora de trasladar este aspecto a la práctica.
Diversos ensayos han demostrado como ante la interacción de usuarios que se les obligue a mantener una velocidad constante realizando un mismo recorrido, el estado de congestión aparece en muy poco tiempo debido a la influencia que ejerce cada ser humano sobre el vehículo y su funcionamiento. Determinado que es el factor humano el verdadero culpable de la generación de retenciones, el siguiente paso no puede ser otro que educarlo.
Con sólo una aplicación para smartphone, hasta un 20% de ahorro
Honda ha desarrollado una aplicación para teléfonos inteligentes que monitoriza nuestro estilo de conducción. Esta información es analizada mediante un algoritmo que determina si estamos creando una situación de congestión. El ensayo realizado en Indonesia ha contando con dos variantes de esta aplicación: una donde sólo se monitoriza al conductor de forma individual y otra donde la aplicación intercambia información con el resto de usuarios para tener en cuenta el estilo de conducción de todos los usuarios de la vía.
La aplicación enfocada únicamente a un usuario ha permitido una reducción de consumo del 20%, mientras que la variante que se soporta en una red de usuarios conectados ha alcanzado el 22%. La aplicación nos muestra nuestra progresión al volante y nos alerta cuando estamos llevando a cabo una conducción que puede inducir a la creación de un atasco.
Fuente: GreenCarCongress | Honda
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