* Magic Body Control
* Cross Traffic Assist
* Visión nocturna con frenada de emergencia
La presentación del nuevo Mercedes Clase S está arrojando importantes titulares tanto en lo referido al propio vehículo, como en las intenciones del fabricante para seguir creciendo y reafirmando su postura como uno de los líderes en el mercado premium. Como ya os hemos comentado durante la presentación del nuevo Clase S, la tecnología se ha convertido en su principal seña de identidad, pero su papel protoganista podría haber contado con un calado mucho más profundo.
Ha sido a través de Thomas Weber, jefe del departamento de investigación y desarrollo de Mercedes-Benz, cuando hemos podido conocer el verdadero potencial de la tecnología instalada en el nuevo Mercedes Clase S. Si el baile de siglas, denominaciones y abreviaciones ya abruma en un primer momento, Weber alude a que la capacidad de desempeño de la tecnología podría ser aún mayor si la legislación vigente permitiera la aplicación de conceptos como la conducción autónoma.
Europa y la conducción autónoma, es turno para hablar de leyes
Se trata de un toque de atención hacia Europa y el escaso interés que está mostrando la UE en la elaboración de un marco legislativo para la llegada del vehículo autónomo. La tecnología lleva advirtiendo de su paso firme hacia este propósito desde hace apenas unos pocos años, pero en los últimos tiempos, la industria ya comienza a hablar de cifras de irrupción de la tecnología para antes de 2020.
Mercedes-Benz afirma que pondrá a la venta un vehículo con capacidad de conducción autónoma antes de que finalice la vida comercial del recientemente presentado Mercedes Clase S, lo cual fija un límite teórico para antes del año 2021. Las intenciones reales de Mercedes pasarían por aprovechar el restyling de esta nueva generación del Mercedes Clase S en torno a 2016-2017 para introducir un sistema avanzado de conducción autónoma como principal novedad tecnológica.
Recordemos que el nuevo Mercedes Clase S ya ofrece un sistema de conducción semiautónoma capaz de gobernar el vehículo a velocidades por debajo de los 60 Km/h en condiciones de tráfico denso, su principal utilidad será la de aliviar al conductor de la congestión del tráfico. Así, la adición de tecnologías como la suspensión predictiva que lee la carretera Magic Body Control y la función de visión nocturna y detección de peatones y animales, remarcan la afirmación de Mercedes-Benz en tanto que la tecnología ya presente en el nuevo Clase S cuenta con plenas posibilidades para hablar de un vehículo capaz de conducir de forma autónoma.
Fuente: WCF
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