Desde hace algo más de dos años, HelloByeCars (HBC) ha propuesto un sistema de alquiler de coches por horas o Car Sharing en las ciudades de Madrid y Zaragoza. Lo más destacable a mi parecer de este servicio está en el hecho de que la oferta de coches sea bastante flexible y oscile de entre el más urbanita y sostenible, un Renault Twizy eléctrico, y modelos premium y prácticamente de representación, todos ellos ofrecidos por Volvo: C30, V40, S60, V60 o incluso un XC60.
Con esta oferta de automóviles se entiende que existan perfiles de clientes tan diferentes y heterogéneos. Desde un joven y estudiante sin coche propio que necesita un coche durante unas horas para cubrir una necesidad puntual, hasta un cliente maduro que está en la ciudad de viaje (por placer o negocios) y busca un coche cómodo y muy bien equipado o incluso el que alquila durante el día un Volvo XC60 en una escapada a la montaña y la nieve para esquiar.
HelloByeCars promueve la llegada de clientes habituales con descuentos especiales, tarifas para menores de 25 años, empresas y autónomos e incluso para clientes de Movistar mediante un acuerdo con esta compañía de telefonía móvil.
Con esta carta de presentación se entiende que aceptásemos la invitación de HelloByeCars para conocer su servicio de coches compartidos y que nos decantásemos por la opción ideal para la urbe, un Renault Twizy eléctrico. Raúl Ortiz de DM Dima nos contaba que este es uno de los proyectos en los que su agencia ha puesto más cariño, así como nos iba contando de qué forma habían dispuesto de una red de puntos de recogidas en parkings muy céntricos y en lugar estratégicos como la estación de trenes de Atocha, que hoy por hoy es uno de los que más éxito tiene.
Aunque parezca que en Madrid existe una gran oferta de aparcamientos públicos, en realidad no es tan sencillo encontrar aquellos que se adecuen a los requisitos de un servicio como el de HelloByeCars y sobre todo que esté abierto y atendido las 24 horas del día. Las ayudas por parte de la administración pública, en la mayoría de los casos, brillan por su ausencia, pero por suerte en ciudades como Madrid un coche compartido cuenta con grandes ventajas como la posibilidad de aparcar en zonas de residentes y el acceso a las Áreas de Prioridad Residencial.
¿Y por qué escoger un Renault Twizy? Para empezar es el más barato de los coches ofertados por esta empresa, desde 3 euros/hora y 30 euros/día con los descuentos actuales. El servicio mínimo es de 3 horas y al ser eléctrico, no tendremos que pagar cuota por kilómetro recorrido ni gastos de combustible o recarga. Lo lógico, para su utilización durante unas horas, es que no necesitemos recargar (la autonomía urbana del Twizy es de aproximadamente 80 kilómetros), pero si tuviéramos que utilizar alguna recarga contaríamos incluso con una tarjeta para recargar de forma gratuita en cualquier punto de recarga del Plan Movele.
Para añadir más flexibilidad en el caso de los coches con motor térmico, los Volvo, HelloByeCars ofrece la posibilidad a sus clientes de repostar por su cuenta y rellenar el depósito con una tarjeta especial en cualquier estación de servicio de la red H-24 o simplemente pagar el kilometraje a una cuota razonable entendiendo la comodidad que supone no preocuparse pasar por la gasolinera (entre 0,13 y 0,19 euros/kilómetro).
Ya solo nos queda reservar el coche en el parking que nos convenga y acceder al coche mediante una tarjeta magnética y un servicio telefónico mediante SMS. El Twizy, al no contar con puertas al uso, obviamente no requiere esa tarjeta para acceder al coche pero sí la recogida de la correspondiente llave. Salvo el Twizy, todos los coches integran un GPS que nos permite comunicarnos con la asistencia técnica de HelloByeCars, navegación y en un futuro otros servicios en línea, como búsqueda de negocios, reservas en hoteles y restaurantes. También se está trabajando en un servicio de «guía turística» que nos contará la historia de la ciudad y nos hablará de los monumentos.
Tuve ocasión de utilizar este Renault Twizy durante apenas unas horas, durante las cuales pude recorrer las calles de Madrid, hacer mis «recados», la compra (lógicamente por las limitaciones de espacio del Twizy, una compra muy ligera) e incluso probar los puntos de recarga del Plan Movele. Al final de la jornada habría recorrido prácticamente 50 kilómetros.
Cuatro horas de alquiler de un Renault Twizy suponen, con descuentos, apenas doce euros. Si tenemos en cuenta el coste de la gasolina (o el diésel) y las tarifas que se pagan en los parking públicos del centro, con la ventaja de que el Twizy puede aparcarse sin carga adicional en los aparcamientos regulados por O.R.A. y para residentes, está claro que al final el ahorro es importante respecto a realizar los mismos trayectos con tu coche particular o recurrir al taxi.
Ciertamente no es un sustituto del taxi y aún menos del transporte público, pero si una alternativa muy práctica para cubrir esa necesidad puntual de un transporte «privado». Sobre todo si valoras mucho la flexibilidad que te da tener un coche para moverte por la ciudad y aún más las facilidades que ofrece un sistema de car sharing con un pequeño cuadriciclo eléctrico como el Twizy.
En Tecmovia: Probamos Autolib, el “Car Sharing” eléctrico de Paris
