El aparcamiento es, en la gran ciudad, un oscuro objeto de deseo para el común de los mortales. La elevada congestión que sufren los núcleos urbanos ha convertido cualquier espacio de estacionamiento en todo un regalo para evitar tener que pagar por un espacio privado de aparcamiento ya sea en parking privado, parking público o estacionamiento regulado. Ahora es internet la que pone sobre la mesa una nueva forma de ver esta situación cotidiana, pudiendo cambiar para siempre la forma que aparcamos nuestro coche.
El smartphone como protagonista en el aparcamiento
Quizás alguna vez hayas lamentado profundamente tener que abandonar una plaza de aparcamiento, esa plaza que te costó horas encontrar y que además se encontraba cerca de tu destino y donde estabas seguro de que tu coche no sufriría ningún percance. Pensándolo friamente sabes que esa plaza de aparcamiento tiene un valor, subjetivo, pero un valor al fin y al cabo.
Para poner solución a este pensamiento, la aplicación para smartphones MonkeyParking, pone a disposición de sus usuarios la posibilidad de subastar su plaza de aparcamiento. La idea, aplaudida por muchos y criticada por otros tantos al mismo tiempo, ofrece una herramienta sumamente interesante para gestionar el aparcamiento público donde serán los usuarios quienes definan el valor real de una plaza de aparcamiento mediante la puja en tiempo real.
Cambiando de tercio, el gigante Google también quiere ser protagonista en este cambio sobre la forma en que aparcamos. A través de su aplicación/asistente Google Now, nuestro smartphone añade una nueva función de recordatorio que nos permitirá saber en todo momento dónde hemos aparcado nuestro coche gracias a la geolocalización y el uso de los sensores que incluye nuestro teléfono inteligente.
En una apuesta sin precedentes por reinventar la forma en que nos desplazamos, Google apuesta por integrar sus servicios en nuestra vida cotidiana para asesorarnos en cada desplazamiento. Ya sea haciendo uso de sistemas de transporte público, en bicicleta, andando o en coche, el objetivo de Google pasa por asesorarnos en cada nuevo trayecto teniendo en cuenta nuevas variables como es la disponibilidad de aparcamiento, tráfico, climatología, incidencias del tráfico, etc.
Resulta llamativo pensar que nuestro smartphone será protagonista de nuestros futuros desplazamientos, pero la idea de reservar estacionamiento o poder conocer cuál es el transporte que más nos conviene según nuestro destino es un concepto demasiado atractivo como para impedir que este tipo de servicios se conviertan en un rotundo éxito en el futuro más inmediato.
Fuente: Alt1040 | Genbeta
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