Sam Schmidt, un hombre cuadrapléjico tas sufrir un grave accidente de coche hace 10 años, ha vuelto a rodar en circuito gracias a un proyecto sin precedentes, donde la conducción semiautónoma y la tecnología de reconocimiento grstual se han puesto al servicio de las carreras de coches. La idea, bautizada como SAM Project ha permitido cumplir el sueño de Sam de volver a sentir la adrenalina que supone rodar al límite con un auténtico coche de carreras.
Volver a conducir es posible
SAM Project puede definirse como un experimento capaz de eliminar para siempre las limitaciones en movilidad que sufren aquellas personas con algún tipo de parálisis en las funciones motoras. Para Sam, la oportunidad de volver a conducir es sumamente importante ya que su profesión antes de la lesión era la de piloto profesional.
El proyecto parte de un Chevrolet Corvette Stingray al que se le ha añadido un sistema de gobierno remoto para las funciones de dirección, aceleración y freno. Dado el grado de parálisis que sufre Sam Schmidt con sus cuatro extremidades impedidas, el gobierno del vehículo se realiza haciendo único uso de gestos y movimientos realizados con su cabeza.
Cuatro cámaras infrarrojas, un sensor GPS y un sensor de presión serán las herramientas que usará el sistema para recoger las órdenes de Sam durante la conducción. De este modo, cuando Sam mueva la cabeza a un lado u otro, el vehículo girará conforme el grado de inclinación que describa el movimiento.
El movimiento hacia atrás de la cabeza definirá el grado de aceleración, mientras que el freno será controlado mediante un sensor ubicado en la boca de Sam y que controlará haciendo presión. Tres simples órdenes para gobernar las funciones principales que requiere la conducción. La gestión de la planta motopropulsora se mantiene intacta gracias al uso del cambio automático.
Gracias al sistema de conducción desarrollado por Arrow Electronics, Schmidt ha vuelto a pilotar en el circuito de Indianápolis completando un total de 25 vueltas en un primer intento. La gesta abre las puertas para conseguir eliminar barreras existentes en movilidad, poniendo sobre la mesa nuevas formas de extraer el máximo potencial a la tecnología actual para mejorar la vida de todos aquellos que ven reducidas sus posibilidades al sufrir algún tipo de parálisis.
Fuente: Wired
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