El estado de Nevada, EE.UU., se convertirá en el emplazamiento definitivo de la Gigafactoría de Tesla. Como recordarás, los planes de expansión de Tesla Motors para alcanzar una gama con hasta tres modelos, pasan por un ambicioso plan de suministro de baterías para alcanzar los números de producción estimados. Nada menos que una producción anual de 50 GWh serán suficientes para abastecer una producción de 500.000 coches eléctricos, consiguiendo así que el Tesla Model III pueda ser una realidad.
Una producción destinada a 500.000 coches eléctricos/año
Tesla Motors siempre ha tenido ante sí el gran reto de no verse limitada ante la falta de baterías. Junto a Panasonic, quien suministra las actuales celdas que componen los acumuladores energéticos de los Tesla Model S, Tesla ha imaginado un futuro a corto plazo donde las baterías dejen de ser un problema para sus planes de crecimiento. La única vía para alcanzar las cifras de producción exigidas, finalmente se ha traducido en la creación de una factoría dedicada en exclusiva a la fabricación de baterías en suelo norteamericano.
El crecimiento de Tesla Motors también tiene un enemigo que ha obligado al fabricante a acelerar sus planes, y es que EE.UU. está mostrando un gran interés por el impulso de la pila de combustible de Hidrógeno. A través de diversas iniciativas como es el caso de H2USA, el mercado norteamericano aspira a convertirse en un referente de la movilidad eléctrica con dos tecnologías luchando mano a mano. Tesla no quiere dejar pasar su momento dulce, por lo que lanzar al mercado los Model X y Model III es la máxima prioridad.
Dejando a un lado la lucha entre los eléctricos a baterías y la pila de combustible de Hidrógeno, un aspecto a destacar de la Gigafactoría de Tesla será su producción. No nos referimos a cifras, que esperan alcanzar los 50 GWh para el año 2020, sino al origen de toda la energía empleada para producir las baterías. La procedencia de toda la energía empleada para fabricar las baterías, será de origen 100% renovable, cumpliendo así uno de los requisitos que más se olvida a la hora de asociar electromovilidad y la etiqueta de cero emisiones.
Fuente: Tesla Motors
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