Apenas 20 CV separan al Porsche 911 Turbo S de 580 CV del brutal Jaguar F-Type R de 550 CV – también equipado con tracción total permanente. Sobre el papel, son coches de prestaciones similares, orientados al mismo tipo de cliente. Nadie duda de la rapidez, eficacia y contudencia del Jaguar F-Type más potente, pero en una batalla de aceleración en línea recta, la paliza que recibe del Porsche 911 Turbo S marca época. El Launch Control del Porsche es más eficaz, así como su cambio PDK de doble embrague.
No será para tanto la diferencia, pensaréis. El 911 acelera hasta los 96 km/h en 2,6 segundos, casi un segundo más rápido que el felino inglés. Ni siquiera después puede el Jaguar recuperar terreno. Merece ser visto para ser creído.