Ya sabes lo que ha ocurrido en las 24 Horas de Le Mans de 2016. Una victoria de Porsche, tal y como sucedió en 1983, cuando Porsche se alzaba con el título – una victoria 1-2-3 – con el entonces impresionante 956. El trazado era diferente, con una recta de Mulsanne mucho más larga, sin chicanes. Permitía alcanzar a los coches velocidades puntas cercanas a los 400 km/h, y durante unos segundos, relajarse a los pilotos. Así se sentían esos 400 km/h en 1983. Sube el volumen y escucha a ese bóxer de seis cilindros y 635 CV gritar.
¡Visceral!