Al igual que su hermano el Peugeot 107, el Citroën C1 recibe un ligero lavado de cara para actualizar su imagen de acuerdo con los cánones marcados últimamente por Citroën, con modelos como el nuevo C3 Picasso. Los cambios suponen también un aumento de la diferenciación con los Peugeot 107 y Toyota Aygo, hasta ahora muy similares también en diseño. Los principales cambios se centran en la estética, recibiendo los motores una ligera disminución de su consumo de combustible.
Los cambios estéticos afectan principalmente al frontal del C1. Parte de los paragolpes se ha rediseñado, ofreciendo ahora un aspecto más fresco. Varios protectores de plástico negro ahora se pintan del color de la carrocería y se dota de una nueva boca calandra al urbano francés. Otros cambios visuales de menor trascendencia son lo tocante a nuevos embellecedores para las llantas de acero, nuevas llantas de aleación y algún diseño diferente para la tapicería.
Aunque Citroën aún no ha publicado información técnica al completo sobre su remozado urbano sí sostiene que todos los propulsores mejoran su eficiencia. El motor de gasolina 1.0i 12V de 68 CV reduce sus emisiones de CO2 hasta los 106 g/km, cifrándose su consumo medio de combustible en 4.5 /100 km. Seguirá existiendo la opción diésel, un 1.4 HDi de 54 CV con un consumo medio de únicamente 4.1 l/100 km, con una emisión equivalente de CO2 de 109 g/km.
Los Citroën C1 recibirán la denominación AirDream.
Citroën C1, lavado de cara
Vía: carscoop
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