Durante el Salón del Automóvil de New York la japonesa Subaru ha presentado la renovación de su SUV Outback, un vehículo de generosas dimensiones con cinco pasajeros que está presente en nuestro mercado desde hace unos años.
Las marcas definitorias para el lavado de cara que se le acaba de practicar se definen en sutiles diferentes externas, caracterizadas por diversos aspectos. En dimensiones el Outback crece notablemente nada menos que 7 cm en longitud, 5 cm en anchura y 10 cm en altura conformando una imagen real de mayor envergadura. Ésta es muy apta para un SUV que guarda 22.2 cm de altura libre al suelo con los que jugar de cara a salirse de los terrenos establecidos por las señales del suelo.
La crecida del tamaño implica una mejora sustancial del espacio para los pasajeros, con un total de 2.984 litros de volumen en el habitáculo (226 litros más que en la anterior generación). Además de la mejora de la habitabilidad, también se aumenta la capacidad de carga. Gracias a la renovada abatibilidad 60/40 de los asientos traseros se puede obtener una capacidad de carga total cifrada en 2.018 litros. La baja altura del portón ayuda a esta labor.
Estéticamente el Outback es otro, se aleja directamente de un aspecto algo anticuado y tomar curvas más modernas. El punto ejemplarizante lo toma de la nueva berlina Legacy también presentada en New York: frontalmente adopta una parrilla de similares características y unas ópticas mejor integradas, más alargadas hacia las aletas. La parte inferior también se modifica obteniendo un protector más marcado y una mejor vista para las luces antiniebla, con menor tamaño y propio apartado en el parachoques.
De cara a la zaga los cambios son todavía más significativos. A medio camino en el perfil nos encontramos con retrovisores externos más amplios, adecuados a su crecida longitud, raíles de techo más vistosos y una línea acristalada que refleja mayor superficie para las puertas traseras en lugar de para el espacio entre el pilar C y el pilar D. La parte posterior desecha las clásicas luces alargadas por unas integradas entre los bordes y el portón, también tomadas del Legacy.
El cambio de diseño juega un gran papel en el interior, donde se mejoran algunos aspectos. El salpicadero abraza un poco más a los pasajeros y su diseño menos recto deja ver en el centro una zona para pequeños displays, alargada hacia abajo con una nueva y original consola central. Cambia el volante, la zona del cambio o los paneles de las puertas. A pesar de que el interior del Outback actual tenía un buen acabado los cambios realizados van por el buen camino.
Mecánicamente la oferta de motores ha sido revisada en cierta medida. Como acceso se sigue manteniendo el 2.5 litros de cuatro cilindros con 170 CV de potencia y 230 Nm de par máximo, que recibe la tecnología de apertura variable de válvulas para controlar su consumo. La tracción total puede estar relacionada con el bloque motor a través de un cambio manual de seis marchas o un una caja continuamente variable Lineartronic CVT.
En la cota se instaura un nuevo motor 3.6 litros H6 Boxer, nueva herencia del Legacy, que desarrolla 256 CV de potencia y un par máximo de 335 Nm. Para este bloque se utiliza un cambio automático de cinco marchas y la tracción a las cuatro ruedas incorpora la tecnología Variable Torque Distribution (VTD) que varía de forma continuada la cantidad de par transmitido a las ruedas traseras según las circunstancias de conducción.
A nivel de equipamiento la ayuda a la estabilidad Vehicle Dynamics Control está disponible de serie para el Outback así como seis airbags, reposacabezas activos, el climatizador bizona, el equipo de sonido con cargador de 6 CDs, llantas de aleación de 17”, retrovisores retráctiles calefactados, etc. También se instauran nuevas suspensiones con estructura McPherson en el eje delantero y un mayor depósito de combustible de 70 litros.
Subaru Outback 2010
Vía: worldcarfans
