Este fin de semana he leído que la empresa estadounidense EMAV (Electric Motors and Vehicles) ha diseñado un pequeño remolque autopropulsado que permite cargar en marcha las baterías del vehículo eléctrico al que se acople. La idea me ha parecido tan sumamente interesante que no he dudado un momento en acercaros esta posible solución al problema de la autonomía de los eléctricos.
El remolque en cuestión monta un pequeño motor eléctrico alimentado por baterías de litio, por el cual se autopropulsa y evita que el coche tenga que tirar del mismo. Incorpora un GPS que recibe datos de Google Earth para anticiparse al tipo de orografía que se recorrerá, con el fin de adaptar la potencia entregada por el motor a las circunstancias del trayecto.
Aparte de esto monta también un pequeño motor diésel de cuatro cilindros y sólo 750 centímetros cúbicos, que tiene función doble. Por una parte recarga las propias baterías que mueven al remolque pero también sirve para alimentar al paquete de baterías del vehículo eléctrico al que se incorpora el remolque. De esta forma, permite aumentar la autonomía en varias centenas de kilómetros.
Tal y como se puede ver en las fotos, el primer coche sobre el que se ha realizado este proyecto es sobre un Fiat 500, recién aterrizado en EEUU. EMAV asegura que el Fiat 500 eléctrico puede alcanzar una autonomía de hasta 700 millas (1126 km) con sólo seis galones (22.71 l) de gasóleo. Echando cuentas, sale un consumo de sólo 2 l/100 km.
Con este apéndice se logra aumentar espectacularmente la autonomía del coche eléctrico, convirtiéndolo en un eléctrico de rango extendido. El problema es, una vez más, que se depende directamente de combustibles fósiles tradicionales para poder lograr esa autonomía. Por muy pequeño que sea el motor diésel, ahí está su consumo, y en el momento que suba el precio de gasolinas y gasóleos esta opción puede dejar de resultar apetecible.
Este prototipo de remolque aún está en fase de desarrollo, ya que aún no existe una unidad física completa sobre la que valorar la efectividad del sistema. La mayor complejidad la encuentro en el hecho de tener que conectar el generador del remolque con las baterías del coche a través del enganche entre ambas partes, aunque con el tiempo y una caña puede que se encuentre una solución satisfactoria.
Para quien esté entusiasmado con la idea, que sepa que EMAV tiene previsto que el remolque cueste unos 15.000 dólares (10.750 euros). Por ese precio casi nos da para un Fiat 500 nuevo con motor térmico, pero si el proyecto lograra encontrar financiación y tuviera unas ventas aceptable el precio podría reducirse para generalizarlo.
Un remolque para cargar tu vehículo eléctrico
Vía: Wired
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