El lanzamiento del nuevo Honda Civic es inminente. Se trata de la novena generación, pero en el caso europeo, los Civic han sufrido un spin-off del modelo global. Por tanto, estamos ante la segunda generación del Honda Civic europeo. Ya lo hemos visto en directo en el Salón de Frankfurt y os hemos transmitido nuestras impresiones. Sabíamos algunos datos sobre sus motorizaciones, pero desconocíamos medidas exactas como el peso, consumos o las cifras prestacionales.
Honda ha lanzado una nota de prensa en la que se aclaran muchos conceptos que no estaban del todo claros, que recogemos a continuación. En primer lugar, la carrocería de cinco puertas – por el momento la única que se lanzará al mercado – tiene una longitud de 4,28 metros. Su ancho es de 1,77 metros y su alto es de 1,47 metros. Son medidas comunes en el segmento, aunque por debajo por ejemplo de los Ford Focus, Opel Astra o Mazda3. Son casi idénticas a las del actual Renault Mégane de cinco puertas.
Su batalla es de 2.650 mm y me he llevado una grata sorpresa con su peso. El peso en vacío de la versión más ligera es de 1.181 kg, equivalente a un Peugeot 207. La versión más pesada tiene un peso en vacío de 1.363 kg, en consonancia con lo que se estila en el segmento en estos tiempos. Algunas innovaciones de este nuevo Honda Civic se basan en la adaptación al gusto europeo en cuanto a dinámica o eficiencia, equipando sistemas Idle Stop (Stop&Start) o un coeficiente aerodinámico un 13% más bajo que su predecesor.
En cuanto a motorizaciones, se ha confirmado que la gama de gasolina se compone de dos atmosféricos 1.4 i-VTEC y 1.8 i-VTEC. El primero desarrolla 100 CV a 6.000 rpm, con un par máximo de 127 Nm a 4.800 rpm. Con una caja de cambios manual de seis relaciones bastante largas acelera de 0 a 100 km/h en 13,4 segundos y tiene una velocidad punta de 187 km/h. Su sistema Idle Stop consigue unas emisiones de sólo 129 g/km de CO2 con un consumo medio de 5,4 l/100 km.
La opción más potente en gasolina es el 1.8 i-VTEC, que además de con caja manual de seis marchas, se puede encargar con una caja automática de cinco relaciones con convertidor de par. Este motor desarrolla 142 CV a 6.500 rpm (+2 CV que su predecesor) y 174 Nm de par motor a 4.300 rpm. También tiene sistema Stop&Start y consumos contenidos, una media de 5,8 l/100 km con caja de cambios manual y 6,3 l/100 km en versión automática, siempre más hambrienta de combustible.
En cuanto a las prestaciones, la versión manual acelera de 0 a 100 km/h en 9,1 segundos y alcanza 215 km/h. Con caja automática pierde prestaciones, gastando 10,9 segundos en el 0 a 100 km/h y sólo llegando a alcanzar los 210 km/h. En cuanto al motor diésel, creo que es uno de los principales atractivos de la gama. El 2.2 i-DTEC es uno de los motores diésel más refinados y agradables del momento. Se ofrece en su versión de 150 CV, siendo ya el reemplazo del veterano – y popular – 2.2 i-CTDi de 140 CV.
Este moderno turbodiésel common-rail genera 150 CV de potencia a 4.000 rpm y nada menos que 350 Nm de par motor, constante entre las 2.000 y las 2.750 rpm. Con estos credenciales, acelera de 0 a 100 km/h en sólo 8,5 segundos y tiene una velocidad punta de 217 km/h. Lo mejor es su consumo medio de sólo 4,2 l/100 km. No creo que haya un coche mejor en relación a prestaciones/emisiones, sólo emite 110 g/km de dióxido de carbono sin sacrificar la dinámica. Sólo se asocia a una caja de cambios manual de seis relaciones.
Por último, el depósito de combustible tiene 50 litros en todos los casos y la mayor medida de neumáticos disponible será 225/45 R17, aunque también estará disponible en medidas 195/65 R15 y 205/55 R16 en las versiones menos potentes. En unas pocas semanas acudiremos a la presentación y ya os podremos contar de primera mano más impresiones de su conducción. No os alejéis demasiado.
Fuente: Honda
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