Pregunta
¿Qué estás buscando?
Hola, quisiera que me asesoraran sobre qué coche elegir. Quiero pasar de 2 vehículos en la familia, a coche único. Tengo un Escort Familiar y un C5 de gasolina. Mis hijos (2), ya no son tan novatos en la conducción, con más de dos años de experiencia. El uso sería para pequeños viajes de no más de 200 km 2 ó 3 por semana y otros 2 ó 3 al año con una caravana, más bien pequeña. Estamos buscando un tamaño compacto familiar tipo Altea XL, o de los tipo ranchera.
Juan R. Ortiz
Respuesta
La verdad es que Juan no nos da muchas pistas, pues no apunta más que un único modelo a modo de ejemplo y no cierra del todo el formato preferido para su coche familiar. Tampoco indica un límite presupuestario o cifra orientativa, por lo que decenas de modelos podrían encajar en esta descripción, que va desde el monovolumen compacto hasta las versiones familiares de infinidad de modelos que existen en el mercado.
¿Qué formato tiene más sentido, monovolumen o familiar tradicional?
Aprovechando una consulta tan abierta, un buen punto de partida podría ser concretar un formato de carrocería antes de lanzarnos a comentar modelos concretos.
Comenzando por el formato monovolumen, cuenta con una serie de ventajas e inconvenientes que debemos tener en cuenta. La principal ventaja que nos aporta es un mayor espacio interior sin incrementar la longitud, porque la mayor altura del techo permite una posición más vertical a los ocupantes, que no van tan estirados a lo largo del coche. Ergonómicamente, esa postura también es más natural y normalmente también será más cómodo entrar y salir por la altura de las banquetas y la amplitud de las puertas.
El inconveniente principal de un monovolumen, al menos sobre el papel, es la parte dinámica de la ecuación. En movimiento, un coche más alto tendrá una mayor superficie frontal, que se traducirá en una mayor resistencia aerodinámica a igualdad en el resto de características. Esto significa que, en general, andan un poquito menos y tragan un poquito más que sus hermanos de marca en formato más bajo. Por otro lado, un centro de gravedad más alto repercutirá negativamente en el comportamiento del vehículo, dando lugar a mayores balanceos y un tacto menos agradable en curva. Esta es la teoría, luego hay monovolúmenes con un comportamiento sobresaliente, pero siempre será a pesar de su altura, nunca gracias a ella.
Por lo que respecta al formato familiar tradicional, su ventaja principal sería, de nuevo sobre el papel, que tienen mejores cartas en la mano para un mejor comportamiento dinámico, y también ofrecen una menor superficie frontal que jugará a su favor en prestaciones y consumos. Por contra, su habitabilidad suele ser tan solo marginalmente mayor que la de los compactos o berlinas de los que derivan, si es que es mayor, y las mejoras en maletero se traducen en una mayor longitud total, lo que generará algún que otro problema de aparcamiento a lo largo de su vida.
Dicho todo esto y siempre al margen de cualquier consideración estética, si los planes son hacer unos 500 km a la semana de media, más viajes vacacionales con caravana y cuatro adultos a bordo, parece sensato dejar en un segundo plano el comportamiento dinámico puro y viajar en un coche lo más espacioso posible. En este caso, nos llevaría a escoger un monovolumen, que además coincide con la única propuesta mencionada en la consulta.
Por último, para realizar 25.000 km al año por carretera, más bien cargado, y poder defenderse con una caravana, yo apostaría por un turbodiésel de no menos de 120 CV. En esas circunstancias de utilización cada caballo de potencia cuenta, y es importante que contemos con una buena entrega de par a medio régimen para ir más cómodos y no disparar los consumos.
Seat Altea XL
Comenzando por el único modelo mencionado explícitamente, el Seat Altea XL podría ser una opción perfectamente válida para resolver el problema. Es un coche con bastantes años ya en el mercado, que comparte plataforma con el Golf V y Golf VI (una excelente plataforma, aunque ya superada por la recién horneada plataforma MQB del Golf VII). Entre sus virtudes, yo destacaría precisamente la posición de conducción de turismo y el comportamiento dinámico que ofrece, sobresaliente. Tratándose de un modelo en vías de extinción, debería destacar también por un precio muy ajustado en cualquiera de sus versiones.
Como principales pegas, la verdad es que la calidad de acabados y los materiales empleados están algo por debajo de la media en el segmento mientras que la habitabilidad interior, siendo más que holgada para cuatro ocupantes, es en realidad de las más justas entre vehículos similares. Como ejemplo, el Altea es incompatible con la instalación de tres sillas para niños en el asiento trasero, o dos sillas más un tercer ocupante, cosa que sí permiten otros modelos. Tampoco ofrece siete plazas ni siquiera como opción.
En cuanto al precio, en el momento de escribir estas líneas la gama Altea casi al completo cuenta con un descuento promocional de 5.000€ (según web oficial de Seat), lo que nos dejaría un Altea XL TDI de 140CV en el entorno de los 21.000€, dependiendo de acabados y equipamientos. Es un precio muy competitivo para esa potencia, si asumimos que el modelo no está lejos de ser remplazado.
Ford C-Max
A pesar de que este segmento se encuentra muy poblado de modelos en las diferentes marcas, el Ford C-Max es prácticamente el único que nos ofrece un motor similar al del Altea (turbodiésel de 140 CV) sin irse de precio. Igual que sucedía con el Seat, también ofrece a la fecha de escribir estas líneas interesantes descuentos de hasta casi 5.000€, aunque en este caso están sujetos a diferentes condiciones, incluyendo financiación, que habría que estudiar en cada caso. Así, su precio con 140 CV turbodiésel debería ser similar al del Altea XL, siempre en función de equipamientos y acabados.
Del Ford podemos decir que es un coche más moderno que el Altea, o al menos mucho más joven. También resulta algo más espacioso en su habitáculo, con una vocación más de coche familiar por su elevada posición de conducción y en su filosofía en general, aunque no renuncia a un comportamiento dinámico destacado. Incluye la interesante posibilidad de ocultar la plaza central trasera y convertirse en un amplísimo cuatro plazas. En definitiva, una opción algo más actual que parece cubrir todos los frentes que se plantean en la consulta.
Toyota Verso
En una línea un poco más discreta de potencias, se encuentra el Toyota Verso 5 plazas en su versión D-4D 124 CV, que podría considerarse el límite inferior aceptable para arrastrar una caravana dignamente. Es posible configurarlo por un precio final prácticamente idéntico al de los dos modelos anteriores (en el entorno de los 21.000€) porque también hay ahora mismo importantes descuentos en la web de Toyota (entre 3.500€ y 4.000€, según versiones). También está de oferta el techo panorámico, que se puede añadir al acabado Advance por 400€ en lugar de los 1.000€ que cuesta habitualmente y se disfruta especialmente en las plazas traseras. Interesante.
Con sus 124 CV, esta opción se quedaría algo justa en prestaciones y bastante alejada del C-Max y del Altea en este apartado. Si embargo, como vehículo familiar amplio, confortable y de calidad, que además ofrece una estética renovada y un interior moderno y bien construido, probablemente aporte un plus de solidez a largo plazo a cambio de esa merma en prestaciones, todo ello sin alejarse demasiado del presupuesto original. Habría que ver qué valoramos más.
Otras opciones a considerar
Aunque aparentemente se van algo de precio con respecto a esos 21.000€, el mercado ofrece coches muy interesantes en este segmento, como pueden ser los Citroën C4 Picasso HDI 150CV o Renault Scénic dCi 130 CV. Son modelos que ofrecen motores comparables a los mencionados y una habitabilidad incluso superior. Aunque a priori se acercan más a los 24.000€ o 25.000€, yo no dejaría de visitar al menos sendos concesionarios en busca de posibles oportunidades.