Maserati afronta lo que parece estar dispuesta a ser una nueva etapa “dorada”. Una nueva etapa con buenas cifras de ventas. Con una nutrida gama de novedades. Con la deportividad y exclusividad de siempre, pero también creando modelos de volumen, creando un Maserati Quattroporte con una mecánica diésel, creando el Maserati Ghibli.
Buenas cifras de pedidos avalan este nuevo periodo de la marca italiana, una nueva etapa con cierto reflejo en Alfa Romeo, una Alfa Romeo que tras el Alfa Romeo 4C se espera que empiece a recibir nuevos e importantes modelos para volver a posicionarse como una marca premium de referencia.
Maserati ya ha conseguido superar cifras de ventas que duplican a las registradas 5 años atrás. Pero no nos extraña. Cuenta con dos nuevos y fundamentales modelos para ello y se avecina un futuro esperanzador para los del tridente.
Según se señala ya, cuando restan poco más de 2 meses para acabar con el 2013, Maserati ha registrado un volumen de pedidos, medidos hasta finales de septiembre, de 22.500 unidades, cifra sin duda a tener en cuenta si tenemos presente que 5 años atrás, en 2008, se registraba un volumen de ventas de 9.000 unidades… marcando entonces el récord de ventas de la marca. Por tener otra referencia, en 2012, no se llegaban a las 7.000 unidades vendidas.
Los del tridente se han fijado un objetivo. Una cifra. Esperan alcanzar en 2015 un volumen de ventas de 50.000 unidades año. Por ahora se acercan a un ritmo vertiginoso a la mitad de este total pero no cabe duda de que aún queda camino por delante.
Sin duda el Maserati Quattroporte y el nuevo Ghibli ayudan. Ayudan mucho. Pero no serán los únicos pilares en los que se apoyará Maserati. Se avecina otro movimiento fundamental, el de su SUV, el del Maserati Levante, a buen seguro capaz de llevar otros tantos miles de clientes a la marca, pero ¿y qué pasa con la deportividad? Se espera que en 2015 llegue el sustituto del Maserati GranTurismo, al que le seguirá el Maserati GranCabrio… pero además, aparece en el futuro de la marca la idea de un deportivo biplaza de la mano del Maserati GranSport.
Fuente: Automobile Magazine
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