Aunque el salto de Volvo a los híbridos enchufables se produjera con un V60 Plug-In Hybrid, que además de enchufable, también era diésel, los suecos no quieren perder la oportunidad de lanzar híbridos de gasolina, especialmente cuando estos se entienden como vehículos potentes y de cierto corte deportivo.
La segunda razón que ha animado a que Volvo presente en unos días en el Salón de Pekín el Volvo S60L Petrol Plug-In Hybrid, es el hecho de que sus intereses globales ahora estén muy ligados a China. Con un inmenso holding como Geely atesorando el capital de Volvo, la marca sueca tiene abiertas, de par en par, las puertas de China y un producto como este, que además se fabricará localmente, es ideal para atraer a las clases adineradas del gigante asiático. El S60L, por cierto, es una versión de batalla larga del S60 que conocemos en Europa, fabricado desde este invierno en Chengdu, China.
Con el desconocimiento inicial de si Volvo completará su gama en Europa con nuevos híbridos de gasolina basados en esta combinación mecánica, os contaremos por qué resulta tan interesante este coche.
Volvo ha escogido un motor de gasolina de cuatro cilindros sobrealimentado, un Drive-E de 238 CV ya de por si bastante eficiente, complementado con un motor eléctrico de 68 CV y un cambio automático de ocho relaciones. Otra de las claves, su batería de ion de litio de 11,2 kWh capaz de permitir una autonomía eléctrica similar a la de su homólogo diésel, de 50 kilómetros sin consumir una gota de gasolina. Aprovechando al máximo su depósito de gasolina, Volvo estima una autonomía teórica sobre los mil kilómetros.
El Volvo S60L Petrol Plug-In Hybrid también brilla por sus prestaciones. En conjunto estamos hablando de más de 300 CV de potencia útil y picos de par de hasta 550 Nm. En el 0 a 100 km/h tarda 5,5 segundos, que no está nada mal, sobre todo si tenemos en cuenta que en este sprint es un segundo más rápido que el diésel.
Otra de las claves de este sistema híbrido, como también viéramos en el diésel, es que su disposición de motor térmico delantero y eléctrico trasero, permite emplear una suerte de sistema de tracción total permanente sin necesidad de conexión física entre ejes, con el consecuente ahorro de peso y espacio para el habitáculo y las baterías.
Fuente: Volvo
En Tecmovia: Volvo V60 Hybrid, el primer híbrido diésel enchufable a partir de 57.000 €