Ya sabemos el precio del nuevo Toyota Prius, un Toyota Prius que se posiciona, por precio, por encima de los compactos generalistas en su rango de potencia, por encima del SEAT León, del Volkswagen Golf, del Renault Mégane… adentrándose por tanto en el territorio de los compactos premium, del Mercedes Clase A, el Audi A3 o el BMW Serie 1, pero… ¿por qué comprar un Toyota Prius en lugar de uno de estos compactos premium?
¿El encanto de tener un coche diferente no es suficiente? Además está bien equipado:
El Toyota Prius nos ofrece una mecánica híbrida de 122 caballos por un precio de partida de 32.250 euros (29.990 euros con las ofertas disponibles actualmente) un precio que lo sitúa por encima del Mercedes A 180, gasolina de 122 caballos y con un precio de partida de 28.075 euros y por encima del BMW 118i de 5 puertas que, con 136 caballos, parte desde 27.550 euros.
Por tanto, ¿qué nos ofrece el Toyota Prius frente a estos compactos?¿Qué justifica su sobreprecio frente a modelos aparentemente superiores en términos de acabados, detalles…?
Debemos entender que el Toyota Prius no es un compacto más, es ya un icono que no sólo busca ofrecernos una solución de movilidad dentro del segmento C, que también, sino que además representa unos valores que van más allá de su desempeño ecológico. Es un coche que por diseño y tecnología encantará al publico más techie y que además se ha ganado cierta etiqueta “cool”, de coche que “mola”.
Y por si no fuera suficiente tiene una buena dotación de equipamiento (sensores de aparcamiento, sistema multimedia con pantalla táctil…) y una apariencia extravagante con mucha personalidad.