Ya no tienes que esperar más. Aquí está la última gran bestia desarrollada por Jaguar Land Rover, nada menos que 550 CV de genuino todoterreno bajo la denominación Range Rover Sport SVR. Efectivamente, no estamos ante el deportivo que podríamos imaginar al barajar cifras por encima de los 500 CV, pero este Range Rover Sport ha querido acercarse tanto al Jaguar F-Type R, que sus coqueteos con los circuitos pueden ser igual de satisfactorios que la escapadas off-road. Nürburgring da buena fe de ello, y es que el nuevo Range Rover Sport SVR es rey indiscutible en la nueva era de SUV de altas prestaciones.
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8 minutos y 14 segundos es el tiempo que necesita el Range Rover Sport SVR, para demostrar que eso de destrozar cronos en el Nürburgring Nordschleife no es coto exclusivo de deportivos. Hablamos del SUV más rápido en el circuito alemán, y es que Land Rover ha querido dejar muy claro que, aunque lo suyo siempre ha sido destacar muy lejos de los circuitos, en esta nueva etapa, medirse con los más laureado del mercado es coser y cantar con sólo echar mano de su nuevo departamento para operaciones especiales.
La gran novedad del conjunto la encontramos en el grupo motopropulsor. El motor 5.0 V8 sobrealimentado por compresor volumétrico alcanza ahora 550 CV de potencia máxima. Junto a esta nueva modificación del propulsor, el Range Rover Sport SVR instala un nuevo cambio automático por convertidor de par con ocho relaciones firmado por ZF, encargado de distribuir los 680 Nm de par motor a las cuatro ruedas de forma permanente.
Para mantener intactas las prestaciones fuera de entornos civilizados, el sistema Terrain Responde 2 permanece como absoluto protagonista gestionando el reparto de par entre las cuatro ruedas motrices. El diferencial central – de serie – podrá ser bloqueado a voluntad, mientras que existe la posibilidad de añadir un diferencial trasero con autoblocante de forma opcional.
Dejando a un lado las capacidades fuera de asfalto, el Range Rover Sport SVR luce con orgullo una hoja de prestaciones más que sobresaliente pese a los casi 2.400 kilogramos de peso homologados. Mientras la velocidad máxima estará limitada electrónicamente en unos respetables 260 Km/h, su aceleración para cubrir el 0-100 Km/h parará el cronómetro en 4,7 segundos, y todo ello permitiendo profundidades de vadeo de 850mm y un ángulo de ataque de 30º. Es rápido y potente, pero ante todo, es un Range.
Para hacernos una idea de cómo Land Rover ha conseguido que este Range Rover se codee con los más ilustres, tan sólo es necesario recordar que el Jaguar F-Type R con idéntico motor 5.0 V8 Supercharged de 550 CV, realiza el 0-100 Km/h en 4,2 segundos, apenas medio segundo más rápido que el abrumador Range Rover Sport SVR.
A nivel de equipamiento, las siglas SVR han añadido personalidad y distinción al ya sublime Range Rover Sport. Entre los detalles más destacables, es imposible pasar por alto la adopción de asientos tipo baquets para las plazas delanteras, y semi-baquets para la fila posterior. Transportar con el máximo de los lujos y refinamiento hasta 5 personas sigue siendo posible, pero ahora todo cobra un matiz más radical y contundente.
En el plano estético, el Range Rover Sport SVR no esconde su nueva filosofía. Es un lobo, y por ello se muestra como tal. Mientras en el interior la fibra de carbono se codea con la piel, en el exterior sucede de igual forma con los detalles en color negro mate y las nuevas y voluptuosas canalizaciones de aire introducidas en paragolpes delantero y tomas laterales.
Su estética gana músculo, destacando un frontal más vertical y amenazante, junto a una trasera que cobija un difusor escoltado por cuatro salidas de escape. Justamente es en su difusor donde más deberemos centrar nuestra atención, pues como ya sucede en el caso de los F-Type y variantes R, la melodía que emana de estos cuatro tenores conseguirá que te olvides de todos los datos y especificaciones memorizados, pues así podrás dejarte seducir por un bramido único e inconfundible.