Volvemos a la carga con un nuevo episodio de “This vs. That”, una fantástica serie de vídeos con carreras de aceleración de lo más peculiar. Son la estrella de Hoonigan, uno de los canales de YouTube de coches a los que cualquier petrolhead que se precie de serlo debería estar suscrito. This vs. That son carreras de aceleración entre coches tan dispares como los del vídeo de hoy: un Honda Civic Type R capaz de entregar 600 CV a las ruedas y el Bentley Continental GT3 con el que Rhys Millen subió Pikes Peak en la categoría Unlimited en el presente año.
Un Bentley que parte de la base de un Continental GT3, pero que poco tiene que ver como el coche del Mundial de Resistencia. Su aerodinámica está completamente diseñada a medida y tiene un spoiler delantero tan ancho como un camión. La mayor parte de componentes de su carrocería son ad-hoc y su motor 4.0 V8 TFSI desarrolla más de 800 CV, gracias a nuevos turbos y otras mejoras. Por su parte, el Honda Civic tiene un motor seriamente modificado, con componentes internos reforzados y una potencia al cigüeñal en el entorno de los 700 CV.
Ninguno de los dos coches son óptimos – ni mucho menos – para el drag racing. En la primera carrera el Bentley se impone, no sin ciertas dificultades, pero en el resto de carreras, entra en modo a prueba de fallos – Rhys Millen afirma que una semana parado en Pebble Beach ha pasado factura a su batería – y no consigue dar la talla a nivel prestacional. El resultado es que el Honda se impone en las dos carreras siguientes y logra la victoria. Una victoria agridulce, ya que no ha sido una victoria del todo justa para el Bentley. Pero así es la vida: no siempre es justa.