Ha sido uno de los bombazos de las últimas semanas. Regresa el BMW Serie 8. Os contábamos que el regreso del BMW Serie 8 es un acontecimiento importante. Primero, por los precedentes, por el hecho de que su predecesor fuera uno de los coupés más innovadores de la época. Segundo, porque BMW apuesta por un producto con un posicionamiento superior al que hasta ahora podía aspirar el BMW Serie 6. Sabemos que habrá un BMW Serie 8 Coupé y que su aspecto será prácticamente el mismo que hemos visto estos días en el BMW Serie 8 Concept presentado en el Concorso d’Eleganza Villa d’Este. ¿Pero por qué no un BMW Serie 8 descapotable? ¿Habría sitio incluso para otras carrocerías, como un shooting brake?
A la vista de estas recreaciones, creadas por X-Tomi Design, la idea de un BMW Serie 8 Cabrio sería la mar de interesante. Y no solo eso. También parece la solución más socorrida. Aunque de momento tan solo se haya confirmado el BMW Serie 8 Coupé, no dudamos que las posibilidades de que vayamos a verlo con una carrocería descapotable sean realmente altas. La carrocería descapotable, por ejemplo, fue uno de los pilares fundamentales de la gama BMW Serie 6, junto con el coupé, y un socorrido sedán con estilo de coupé denominado Gran Coupé.
¿Pero habría sitio para otras carrocerías más allá del Coupé y el descapotable?
X-Tomi Design ha ido más allá y ha pensado que transformar el BMW Serie 8 Concept en un práctico shooting brake sería una buena idea. Este tipo de diseños, de deportivos con portón trasero, no solo conlleva apostar por un diseño ciertamente muy deportivo – es la solución empleada por el Ferrari FF y el Ferrari GTC4Lusso, por ejemplo – sino también mejorar el espacio a bordo, sobre todo en las plazas traseras, y mejorar la accesibilidad y el espacio del maletero.
Pero, por atractivo que nos resulte este diseño, la realidad nos invita a pensar que la única posibilidad que plantearía BMW, de apostar por una carrocería más práctica, sería la de crear un BMW Serie 8 Gran Coupé, con cuatro puertas. Un producto lujoso y aspiracional, pero también con un componente deportivo que no podría ofrecerse en un BMW Serie 7.
Y si bien es cierto aún no se ha confirmado que vaya a existir un BMW Serie 8 Gran Coupé, sí que sería la opción más lógica, a tenor de que esa ha sido la estrategia seguida en los coupés de los segmentos inferiores, como el BMW Serie 4 y el BMW Serie 6.