El Jeep Cherokee XJ – en plata, el Cherokee de los ochenta y noventa – es considerado uno de los todoterrenos más icónicos de toda la historia. Aunque tenía reductora y un chasis de largueros y travesaños, es también conocido por ser uno de los precursores de la moda SUV. Muchos nunca fueron usados fuera del asfalto, si no como coches familiares. El motor de seis cilindros en línea y 4,0 litros – diseñado por AMC – del Jeep Cherokee XJ es legendario, y en este vídeo, veréis cómo es reconstruido, mejorado y potenciado en un delicioso timelapse.
De serie, este motor desarrollaba unos tímidos 180 CV. No era un motor realmente «apretado», estaba diseñado con la durabilidad en mente. El motor del Jeep Cherokee Sport del año 1993 de Hagerty estaba ya un poco cansado, así que fue reconstruido. Todo el proceso de desmontaje tiene como objetivo el planificado de su culata y el reemplazo de componentes claves del motor, como los pistones o las bielas. Se han instalado los pistones de otro motor de Jeep de 4,2 litros, y además, se ha mecanizado el bloque para elevar el cubicaje del motor hasta los 4,6 litros.
Por si fuera poco, se ha instalado un nuevo árbol de levas – solo uno, tiene dos válvulas por cilindro – para obtener algo más de potencia. El dato final de potencia no es conocido, pero no nos extrañaría que rondase los 300 CV. Un detalle curioso es el proceso de «rodaje»: 20 minutos a 2.500 rpm constantes con un aceite especial desarrollado por VP Racing. El vídeo en sí no tiene desperdicio, así como tampoco lo tiene el bonito sonido de este Cherokee Sport. Una unidad muy especial y muy deseable de un todoterreno que ya es un verdadero icono.