Curiosa la acción de Volvo. Si no fuera porque incurre en muchos errores. Imaginaos que estáis conduciendo por las carreteras californianas, pongamos que en un Jeep Wrangler levantado del suelo, y que en el margen derecho de la carretera os encontráis a un Volvo XC90 que os agradece que le proporcionéis energía para recargar sus baterías. Como iniciativa para sorprender anunciando el Volvo XC90, e incluso dar caña a sus rivales, está muy bien. Como iniciativa para saber que existe un Volvo XC90 T8 que es híbrido, enchufable, que goza de motor de cuatro cilindros con turbo y compresor para llegar a los 400 CV de potencia, también está bien. Ver los secretos del Volvo XC90 T8.
El gran problema es que esa energía que desperdician los coches para recargar supuestamente este Volvo, por desgracia, también la desperdiciaría el Volvo XC90, o cualquier otro híbrido enchufable, por el mero hecho de contactar con la superficie modificada de la plataforma en la que se ha integrado este atípico sistema de recuperación, o mejor dicho robo, de energía.
Por otro lado, tenemos serias dudas de que este sistema sea capaz de recuperar suficiente energía para recargar las baterías de un coche. Es cierto que se han presentado avances, y muy interesantes, de sistemas para carreteras capaces de acumular energía gracias al contacto físico con los neumáticos de otros coches. Pero no nos parece que la alternativa propuesta pueda ser viable, ni tampoco confortable.
Sí, somos unos aguafiestas.
¿Pero no podían haber escogido los publicistas de esta acción cualquier otro argumento, muy válido, y riguroso, para hacer que el Volvo XC90 T8 plante cara con datos en la mano a todos sus rivales? Ver 12 imágenes que harán que el Volvo XC90 sea tu SUV favorito.
Fuente: Volvo | Vía: Jalopnik
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