BMW descubre por fin todos los detalles de la tercera generación de su compacto, el BMW Serie 1. Tras muchos teasers y no pocos rumores, la casa de Munich confirma el que era un secreto a voces, el BMW Serie 1 2020 se presenta como una verdadera revolución. Un cambio de gran calado que no solo reinventa el concepto de este coche compacto, sino que se rearma de argumentos para competir con el actual referente de su clase, el Mercedes Clase A, y con un nuevo aspirante al segmento de los compactos premium como es el Mazda 3.
Adiós propulsión: tracción delantera o total
Durante mucho tiempo ha sido un rumor, pero hace escasos días BMW confirmó las sospechas, el Serie 1 2020 es tracción delantera. Gracias a esta nueva arquitectura BMW ha desarrollado el nuevo Serie 1 con la intención de ganar en espacio interior, en aprovechamiento del mismo, reducir el peso en 30 Kg y en aumentar el maletero hasta los 380 litros. El abandono de la propulsión como elemento característico del compacto de BMW es un plato que aún tardará en ser digerido por los más petrolheads, aún así se trata de una decisión tomada por la escasa relevancia de este aspecto como argumento de venta y por ser una apuesta de gran éxito en sus principales rivales como es el caso del Clase A o Audi A3.
BMW Serie 1
Para las variantes más prestacionales como el BMW M135i con 306 CV la tracción total será de serie, una configuración capaz de modificar el reparto de par entre trenes, aunque no podrá enviar todo el par al eje trasero como consigue el sistema xDrive puesto a punto por BMW Motorsport para el BMW M5. Eso sí, BMW ha querido realizar un guiño a sus clientes más exigentes diseñando el Serie 1 para incorporar un esquema de suspensión trasera multibrazo en todas sus versiones, incluso las más sencillas, buscando ofrecer una mejor dinámica y un punto diferenciador frente a Clase A y A3 donde encontramos un puente rígido trasero para las versiones más sencillas.
Nuevo lenguaje de diseño
Como no podía ser de otra forma BMW ha apostado por imprimir en el nuevo Serie 1 los trazos y rasgos vistos en sus últimos lanzamientos, destacando especialmente la integración de los nuevos riñones tamaño XL en el frontal. A ello sumamos una estética que gana mucho en carácter y personalidad, una ganancia que se da en todas las vistas del compacto y que se acompaña por una firma lumíninca LED protagonista con ópticas de diseño horizontal.
BMW ha querido romper con la excesiva sobriedad de la segunda generación para introducir un lenguaje de diseño mucho más marcado, una estética que recorre toda la carrocería con numerosos nervios y líneas de tensión que definen la presencia de este nuevo Serie 1. Sumergidos en el interior los cambios no son tan radicales y la tónica general se mantiene sobria a la par que elegante, acogiendo eso sí los mandos y disposición de controles vistos en lanzamiento recientes como el BMW Serie 8.
Motores del Serie 1 2020
En el momento de su lanzamiento el Serie 1 2020 estará disponible junto a dos motores gasolina y tres motores diésel. En el caso de los gasolina nos encontramos con un BMW 118i con motor 1.5 Turbo de 3 cilindros y 140 CV, mientras que el segundo motor gasolina será BMW M135i con motor 2.0 Turbo de 306 CV. En el caso de la oferta diésel nos encontramos con un BMW 116d defendiendo el acceso de gama con un 1.5 turbodiésel de 3 cilindros y 116 CV, un BMW 118d con motor 2.0 turbodiésel de 150 CV y un BMW 120d con motor 2.0 turbodiésel de 190 CV. Más adelante se espera una ampliación de la oferta gasolina, así como la llegada de variantes híbridas.
La gama de transmisiones disponible abarcará 3 configuraciones posibles: cambio manual de 6 relaciones, cambio automático de doble embrague con 7 relaciones y cambio automático por convertidor de par de 8 relaciones. La tracción total queda reservada para la variante M Performance y el propulsor diésel de 190 CV.
Tecnología como gran reclamo
El infoentretenimiento y las asistencias a la conducción pasan a un primer plano para ser uno de los grandes reclamos del Serie 1 2020. Presentado de una forma menos llamativa – o exagerada – que la vista en el Clase A, BMW no ha escatimado en recursos y presenta en el interior de su nuevo compacto lo último de sus sistemas multimedia. Esto se traduce en una intefaz Connected Drive con pantalla táctil que en función del nivel de equipamiento contará con una diagonal de 8,8 o 10,25″.
A ello también se añade la posibilidad de instalar un cuadro de instrumentos digital con 10,25″ y un Head-Up Display a color de 9,2″. Como punto a destacar en esta renovación del Serie 1 nos encontramos con una gran apuesta por los mandos físicos, algo que desentona con la tendencia vista en muchos de sus rivales, pero que presume de una mejor ergonomía con un climatizador con mandos dedicados o una consola central heredada directamente de las últimas novedades de la marca desde donde controlar el sistema multimedia a través del mando iDrive. Los servicios conectados, las posibilidades en forma de aplicaciones o los asistentes a la conducción forman parte de las muchas posibilidades de este nuevo Serie 1.