La nueva generación del BMW X5 llega pisando fuerte al segmento de los grandes SUV de lujo, especialmente ahora que la competencia es más dura que nunca. Por esta razón BMW dice haber echado el resto para crear un nuevo X5 que pretende ser un referente tanto en conducción deportiva, como en conducción todoterreno. ¿Y cómo demostrarlo? BMW ha creado un circuito calcado a Monza en pleno desierto del Sahara, una locura de trazado inundado de arena que promete mucha diversión.
BMW se ha ido hasta Marruecos para crear allí un nuevo circuito de Monza a escala 1:1, una recreación que promete haberse realizado de forma completamente fiel al trazado original, cambiando únicamente la composición de la superficie que pasa de asfalto a arena. Para realizar esta recreación un equipo de 50 personas trabajó durante dos semanas removiendo nada menos que 3.500 metros cúbicos de arena para conseguir semejante resultado.
BMW X5
La idea de BMW es clara, demostrar las cualidades del nuevo X5 en esa dualidad de conducción deportiva y todoterreno. Durante el desarrollo de esta nueva generación del X5, la cuarta ya, los ingenieros de BMW apostaron por integrar mejores aptitudes fuera de asfalto. Esta mejora de las cualidades todoterreno tiene como objetivo alejarse de los SUV más convencionales pensados para un uso 100% urbano, colocándose así como un rival directo de modelos como el Range Rover Sport.
Aunque no es la primera vez que se realiza una recreación de un circuito a escala real, sí que es la primera vez que alguien se toma tantas molestias para llevarlo hasta el desierto del Sahara. Aún así, tampoco podemos olvidarnos de que en el círculo polar ártico también existen miles de kilómetros de hielo y nieve reconvertidos en circuitos de competición, una zona muy cotizada por los fabricantes de coches donde podemos encontrarnos recreaciones de circuitos de todo el mundo como Silverstone o el propio Monza (ver prueba Nissan GT-R en Laponia). Allí no solo se desarrollan las pruebas de puesta a punto de los coches antes de llegar al mercado, sino que se aprovecha todo el invierno para realizar numerosos programas de conducción sobre nieve como el Aston Martin On Ice.