Citroën presenta al fin su esperado SUV compacto bajo el nombre de Citroën C5 Aircross, un modelo que está llamado a ser uno de los best seller de la marca a partir de ahora. Ocupando un escalón superior a los Citroën C3 Aircross y Citroën C4 Cactus, el Citroën C5 Aircross se convierte en el nuevo tope de gama del fabricantes francés, apostando nuevamente por mucha personalidad en su diseño y soluciones, pero sobre todo, con tecnología y motores de última generación para meterse de lleno en la reñida batalla que existe entre los SUV compactos con pesos pesados como Nissan Qashqai, Hyundai Tucson o Peugeot 3008.
Un SUV compacto al estilo Citroën
Como era de esperar el Citroën C5 Aircross apuesta de forma clara por el diseño, una estética que es su principal reclamo para hacer frente a la competencia. Formas abultadas, con aditamentos como los Airbumps – aunque cada vez menos protagonistas –, con posibilidad de combinar colores en molduras exteriores, con una enorme parrilla frontal que acoge las nuevas ópticas LED y con una vista lateral y trasera que nos recuerda poderosamente al C3 Aircross para ofrecer esa imagen de familia, aunque convenientemente adaptada al tamaño de este SUV que ya alcanza los 4,5 metros de longitud, 5 cm más que el Peugeot 3008.
Citroën C5 Aircross
En el interior nos encontramos con la misma tónica que en el exterior, con un especial énfasis en que todos los materiales que dan forma al habitáculo gocen de detalles y motivos llamativos. De este modo nos encontramos con un salpicadero de líneas horizontales donde destacan la interfaz multimedia con pantalla táctil de 8 pulgadas – practicamente idéntica a la ya vista en DS 7 Crossback o el nuevo Peugeot 508 – y el cuadro de insrtumentos completamente digital con 12,3 pulgadas. A falta de conocer en persona la calidad de ajustes y materiales empleados en el C5 Aircross, sí que parece sensato esperar un salto cualitativo con respecto a su inmediato hermano menor el C4 Cactus. Teniendo como referencia al Peugeot 3008 con el cual comparte el grueso de elementos y del que sí hemos podido dar cuenta en nuestra prueba del Peugeot 3008, resulta lógico pensar que el C5 Aircross se moverá en un nivel similar.
Gracias al uso de la plataforma modular EMP2 se consigue un buen aprovechamiento del espacio interior, ofreciendo espacio para 5 ocupantes y un volumen de carga que nos lleva a disfrutar de 580 a 720 litros de maletero en función de la posición de los asientos traseros, alcanzando los 1.630 litros abatiendo la segunda fila. El C5 Aircross contará con 3 asientos traseros independientes con posibilidad de reclinación de 19 a 26,5º, abatibles de forma independiente y también escamoteables.
¿Qué hay de la tecnología en el C5 Aircross?
Como no podía ser de otra forma en cualquier nuevo lanzamiento, la tecnología y las asistencias a la conducción son parte fundamental del C5 Aircross. Esto nos lleva a encontrar novedades hasta ahora inéditas en la gama como son los faros Full LED, control de crucero adaptativo con asistente para el mantenimiento de carril y función Stop&Go, frenada autónoma de emergencia, reconocimiento de señales, alerta de tráfico trasero y presencia en ángulo muerto, detector de fatiga, sistema de cámaras con visión 360º, etc.
El infoentretenimiento corre de la mano de la interfaz ya vista en otros modelos de la marca, evolucionada recientemente con el lanzamiento del Peugeot 508. Esta nueva interfaz aglutina el grueso de las funciones para reducir al máxima la presencia de botones físicos, encontrando así como elementos como el climatizador o el sistema de audio habrá que gestionarlos a través de la interfaz. Aún así encontramos accesos directos bajo la pantalla, mandos con los que se pretende ofrecer una mejor ergonomía a la hora de acceder a funciones específicas. La compatibilidad con Apple CarPlay y Android Auto permitirá a los usuarios disfrutar del contenido de sus smartphones.
Motores del Citroën C5 Aircross
A nivel técnico el primer punto donde debemos detenernos es en el uso de la plataforma modular EMP2 de PSA, plataforma que ya emplean otros modelos de la marca como los Peugeot 3008 y Peugeot 5008. Aún así, la principal diferenciación que traerá el C5 Aircross con respecto a sus competidores la encontraremos en la suspensión Progressive Hydraulic Cushions, una tecnología que emplea topes hidráulicos en los amortiguadores para incrementar sensiblemente el confort. Esta solución ya ha sido estrenada en la última renovación del Citroën C4 Cactus.
La oferta de propulsores estará compuesta por los bloques 1.2 PureTech de 130 CV, el 1.6 PureTech de 180CV, el 1.5 BlueHDI de 130 CV y el 2.0 BlueHDI de 180 CV. Una de las grandes novedades que traerá el C5 Aircross a la gama Citroën es la adopción del nuevo cambio automático por convertidor de par de 8 relaciones, un cambio que promete ofrecer el mejor equilibrio entre confort y eficiencia en la gama.
El Citroën C5 Aircross mantiene vigente la apuesta de PSA por no hacer uso de sistemas de tracción total 4×4, de este modo la configuración más offroad será a través de la combinación del sistema Grip Control que permite seleccionar hasta 5 modos de conducción, una altura libre al suelo de 230mm y unos neumáticos M+S. Aunque algunos de sus más directos competidores sí que ofrecen la posibilidad de instalar tracción 4×4, tanto Peugeot como Citroën confían en esta solución ya que admiten que la repercusión en ventas de las versiones 4×4 no compensaría su oferta.
Citroën abre la puerta a los híbridos
Pero la gran novedad, aunque habrá que esperar hasta 2019, es un motor híbrido enchufable que será capaz de alcanzar los 300 CV de potencia máxima combinada y una autonomía de 60 kilómetros en modo 100% eléctrico. A futuro también cabe esperar que el nuevo Citroën C5 Aircross sea uno de los modelos beneficiados por el nuevo sistema microhíbrido de PSA, un sistema con el que todas las marcas del grupo electrificarán sus motores diésel y gasolina gracias a un cambio de doble embrague diseñado para integrar un motor eléctrico trabajando a 48 voltios.