El CUPRA Formentor es un gran crossover. Un coche de excelente tacto de conducción, gran carga tecnológica, buena calidad de construcción y practicidad razonable. En sus versiones de acceso arranca en poco más de 32.000 euros. Es un coche ya más popular que el SEAT Ateca, su primo hermano, con quien comparte motores, plataforma e incluso sede productiva. Sin embargo, no debemos perder el foco: por menos de lo que cuesta un CUPRA Formentor podrías llevarte a casa uno de los Renault más especiales jamás fabricados. Sí, un Renault Safrane Biturbo.
Será sencillo cruzarte con muchos otros CUPRA Formentor por las calles – ya son habituales en nuestras carreteras – pero será todo un acontecimiento que avistes otro Renault Safrane por la calle. Y más difícil aun si hablamos de un Safrane Biturbo, de los que sólo se fabricaron 806 unidades entre los años 1994 y 1996. A esta superberlina francesa le hemos dedicado ya ríos de tinta virtual. A modo de resumen, podríamos decir que fue el intento de Renault de luchar contra coches como el Audi S6, el BMW M5 E34 o las versiones AMG del Mercedes Clase E.
CUPRA Formentor
Para lograr un nivel de prestigio e imagen equivalentes a los de sus rivales alemanes, Renault recurrió a los preparadores germanos Hartge e Irmscher. Partiendo del motor 3.0 V6 PRV de dos válvulas por cilindros, los preparadores lo sobrealimentaron mediante dos turbos KKK, llegando a lograr una potencia final de 300 CV. No obstante, ya que Renault no tenía un cambio capaz de soportar su potencia, tuvieron que rebajar la cifra final a 268 CV. A mayores, dotaron al coche de un sistema de tracción total permanente Quadra 4WD.
Este sistema permitía variar el reparto de potencia mediante un acoplamiento viscoso y podía enviar hasta el 90% de su fuerza al eje trasero. Era un coche rápido, capaz de hacer el 0 a 100 km/h en solo 7,2 segundos, con una velocidad máxima de 250 km/h. Además, contaba con una suspensión adaptativa y una puesta a punto más deportiva. Su interior estaba realmente bien rematado, especialmente en su versión tope de gama Baccara. Su nivel de equipamiento y lujo nada tenía que envidiar al de la mejor berlina alemana del momento.
Sin embargo, el coche fue un absoluto fracaso comercial. Y quizá el principal motivo era el rombo que había sobre su capó, además de la ausencia de berlinas deportivas de altos vuelos en la historia de Renault, más allá de excepciones terrenales como el Renault 21 Turbo. Su fracaso comercial no es, no obstante, una señal de que el Safrane Biturbo fuese un mal coche. Simplemente un coche incomprendido. A día de hoy, esta superberlina francesa es uno de los youngtimers más exóticos que se pueden comprar.
Cuando una unidad sale a la venta es noticia. Y es lo que acaba de ocurrir en Francia. Una unidad del año 1996, de las últimas fabricadas, y con solo 105.874 km en el odómetro, acaba de salir a la venta en la localidad de Montgardin. No es un Baccara, pero su equipamiento es realmente amplio – asientos eléctricos, ordenador de a bordo, ABS, doble airbag… – y el coche se encuentra en un estado realmente cuidado. Su precio es de 31.000 euros exactos. Y créeme, nadie más va a tener uno cuando vayas a buscar a tus hijos al colegio.
Fuente: autoforum.cz