El nuevo Dacia Duster ha conseguido 3 estrellas en las pruebas de seguridad EURONCAP con su equipamiento básico, mientras rivales como el Hyundai Kona, el SEAT Arona o el Citroën C3 Aircross obtienen 5 estrellas en las mismas pruebas. Esto significa que el Dacia Duster es “objetivamente menos seguro” que otros coches lanzados este mismo año, de acuerdo con las mejores pruebas que existen actualmente y nos hace pensar que Dacia ha ahorrado costes en seguridad para conseguir un precio muy competitivo. La pregunta es: ¿deberíamos descartar la compra de un Duster por este motivo?
Un poco de perspectiva sobre el Dacia Duster y la seguridad
Me temo que es innegable que el Dacia Duster es menos seguro que muchos de sus rivales directos, sobre todo los más recientes y probablemente sí debería ser un factor relevante de compra. Dicho esto, no es menos cierto que las pruebas de choque han ido avanzando y haciéndose más y más exigentes cada año, hasta el punto de que coches con 5 estrellas hace pocos años ahora se conforman con 3.
Dacia Duster
Posiblemente este sea el caso del Dacia Duster, y ello es derivado de la filosofía de la marca. El Duster es un coche hecho con tecnología probada y amortizada y basado en una plataforma de bajo coste que comparte (más o menos modificada) con todos los modelos Dacia, desde el Sandero hasta el Lodgy. Se trata de una plataforma propia, derivada de Renault pero exclusiva de Dacia, que está pensada para mantener un bajo coste de fabricación y unas prestaciones de rigidez y comportamiento aceptables.
A partir de aquí, es probable que el Duster actual hubiese sido un coche de 5 estrellas Euroncap hace unos pocos años, pero ahora mismo no incorpora lo último de lo último en seguridad sino lo penúltimo, al igual que en motores y piezas en general.
¿Qué ha fallado en las pruebas de choque?
Lo que más ha penalizado los resultados del Dacia Duster ha sido la colisión frontal contra una barrera indeformable a todo lo ancho del coche. Esta prueba equivale a estrellarse contra un muro de hormigón justo de frente a 50 km/h. En este severísimo accidente la cabeza del conductor sufre deceleraciones por encima de lo admisible, perdiendo todos los puntos en el Dacia Duster.
Es cierto que otros coches se comportan mucho mejor en este y en los restantes tests, pero quizás sería exagerado pensar que comprarse un Duster es comprarse un coche peligroso o inseguro. No es el caso. Podría ser aún más seguro y hay coches que ofrecen ese nivel a día de hoy, pero también podría ser más eficiente o estar mejor acabado, a cambio de ser más caro.
El dilema moral de fallar en seguridad
Tal vez el principal problema de un coche como el Duster, que proviene de un grupo que ha hecho de la seguridad su bandera, es el dilema moral que supone ahorrar costes en seguridad. Ese ahorro se traducirá en algunos casos extremos en lesiones o incluso el fallecimiento de sus ocupantes, un fallecimiento que en teoría podría evitarse con la actual tecnología de Renault.
Pero ese problema, en realidad, está presente en todo el mercado. Los coches más pequeños y más baratos soportan peor los accidentes que los más grandes y caros, e incluso dentro de las gamas de cualquier fabricante encontramos equipamientos opcionales (que hay que pagar aparte) que refuerzan la seguridad, con lo cual se le está dando la opción al propio cliente de no incorporarlos para ahorrarse dinero.
Finalmente, la seguridad tiene un precio como casi todo en esta vida, y en el caso del Duster, como en cualquier otro caso, nos ofrece el nivel de seguridad que estamos pagando: podría ser mayor pagando más y podría también ser menor pagando menos. Quien busque un coche de este precio, por la razón que sea, seguro que es consciente de que está renunciando a ciertas cosas en cierta medida.
Sabiendo eso, me sigue pareciendo una opción muy razonable dentro de su precio.