Coincidiendo con el Salón de Los Ángeles, Volkswagen ha presentado al mundo su visión de futuro para los coches familiares eléctricos. Se llama Volkswagen ID Space Vizzion, al que probablemente conoceremos como Volkswagen ID.7, y es el anticipo de un futuro modelo de producción de la familia ID, de la que ya conocemos el Volkswagen ID.3 definitivo y muchas de las características del Volkswagen ID.4. Es un escultural coche familiar, no un crossover, algo que nos da un respiro en un mundo que parece cada vez más obsesionado con los todocaminos. Entre otras lindezas, será capaz de recorrer hasta 590 km según el ciclo WLTP, con prestaciones dignas de un deportivo.
Su lenguaje de diseño es puramente conceptual, con claros lazos de familia con los prototipos de la familia ID presentados hasta ahora. No obstante, conociendo el ID.3, no está tan alejado de lo que será el coche de producción en serie. El frontal está casi completamente carenado, con un bonito juego estilístico para los LEDs diurnos y una fina calandra que dirige el flujo de aire hacia el techo del coche. Un perfil lateral orgánico y elegante dirige nuestra mirada hacia una caída del techo suave, desembocando en una zaga donde la óptica LED tiene todo el protagonismo.
Volkswagen ID.7
Es un coche decididamente bonito, y nos muestra que no es necesario fabricar un crossover de cuatro puertas para excitarnos acerca del futuro de los coches eléctricos. Además, su coeficiente aerodinámico de solo 0,24 ayudará a que su eficiencia sea muy superior a la de carrocerías más voluminosas. El interior del coche tiene soluciones más conceptuales, con un diseño muy limpio en el que destaca la pantalla central – flotante y de 15,6 pulgadas de diagonal – a través de la que se controlarán la práctica totalidad de funciones del coche.
Una pequeña instrumentación digital frente al volante nos dirá la velocidad a la que vamos, y poco más. El volante de dos radios nos gusta, pero no nos gusta la casi total ausencia de botones en el coche. Atinar a ciertas funciones mientras conducimos nos distrae y minora nuestra seguridad. Los asientos tienen un bonito tapizado y el interior es amplio, al igual que el maletero, en el que Volkswagen ha instalado dos monopatines eléctricos, que se recargan sobre la marcha. Hablando de electricidad, es hora de conocer el grupo motopropulsor del coche.
Emplea una versión modificada de la plataforma MEB, con una batería de iones de litio de 82 kWh de capacidad. Su autonomía combinada WLTP sería de nada menos que 590 km, similar a la de un Tesla Model S. Gracias a una potencia total de 250 kW procedente de dos motores – 340 CV, para los que no estamos acostumbrados a los kilowatios – y tracción total permanente, el Volkswagen ID Space Vizzion será capaz de acelerar hasta los 100 km/h en 5,4 segundos. Si el futuro de los coches familiares es como este Volkswagen lo pinta, me quedo mucho más tranquilo.