En una gama Toyota donde no paran de crecer los coches híbridos, ¿sigue teniendo sentido vender un Toyota Prius? Esta es la pregunta que nos hacemos ahora que la cuarta generación del Toyota Prius recibe su primera gran actualización y de forma paralela presencia la llegada de los nuevos Toyota Corolla y Toyota RAV4 buscando ser los nuevos reyes entre los híbridos. De haber una quinta generación del Toyota Prius, esta podría llegar con importantes cambios, tan grandes que incluso podría abandonar su condición de híbrido.
Recuerdo como en nuestra primera prueba del Toyota Prius de cuarta generación escuchamos de forma reiterada que Toyota replanteaba su estrategia para con este modelo. De ser un coche destinado a hibridar al gran público se pasaba a la idea de escaparate tecnológico. Una deicisión a todas luces muy lógica, pues la idea de referente de sus tres anteriores generaciones ya estaba más que cumplida. Las ventas de Toyota Auris y Toyota Rav4 eran en su mayoría híbridos, por lo que el mercado ya había captado el mensaje y obligaba a convertir al Prius en un coche más aspiracional.
La cuarta generación se presentó entonces como un coche mucho más avanzado y diferenciado al resto de coches híbridos de la marca, buscando ser un coche de nicho destinado a un perfil de cliente que buscara diferenciación más allá del propulsor, de ahí su despliegue tecnológico y su arriesgado diseño. Aunque las ventas del Toyota Prius actual no han ido del todo mal a nivel global, sí que han mostrado que la idea no ha terminado de cuajar con unas caídas generalizadas, propiciando que el Toyota Prius 2019 no solo estrene un rediseño en clave convencional, sino una interesante versión 4×4 destinada a animar las ventas en un mercado crítico para el Prius como Norteamérica.
El futuro del Prius como coche eléctrico
De este modo, en una entrevista de The Detroit Bureau al jefe de ingeniería de Toyota Koichi Kaneko, éste admitió que Toyota necesita replantear el Toyota Prius para su próxima generación, especialmente ahora que el mercado ha cambiado. A priori este replanteamiento apunta hacia una lógica reconversión del Toyota Prius en coche eléctrico, sin embargo Kaneko descarta esa posibilidad dado que el concepto del Prius necesita mantener su filosofía como coche asequible y no enchufable.
Ante este panorama Kaneko deja la puerta abierta a todo un mundo de posibilidades como nuevas carrocerías, variantes… pero lo que sí que está claro es que el Toyota Prius ya no es el coche híbrido por excelencia en ventas, aunque sí que lo sigue siendo en imagen que no es poco. Sea como fuere, lo que parece inevitable es que la llegada de los nuevos Corolla y RAV4 terminará de sentenciar al Prius tal y como lo conocemos.
