El drag racing es una disciplina deportiva muy poco habitual por estas latitudes, y en ocasiones, denostada e infravalorada. Sin embargo, es una de esas disciplinas de origen popular que más contribuyeron a desarrollar la cultura automovilística estadounidense. En el drag racing hay cabida para todo tipo de vehículos, en el sentido más amplio e inclusivo de la palabra. En esta ocasión, centramos el foco en un coche muy peculiar. Un Honda Civic preparado para carreras de aceleración con casi 1.500 CV… ¡transmitidos al eje delantero!
Honda Civic
El corazón de este bestial Honda Civic es un motor K-Series de Honda. Estos propulsores son conocidos por su dureza y por su fiabilidad, además de por ser capaces de aguantar enormes dosis de sobrealimentación y ser baratos de mantener. En este caso el motor tiene 2,2 litros y está sobrealimentado por un turbo de Precision Turbochargers de 73,9 mm de diámetro. Una enorme caracola que suministra el coche hasta 3,9 bar de presión de sobrealimentación en competición. El resultado son unos 1.300 CV medidos en las ruedas delanteras.
Si tenemos en cuenta las pérdidas por fricción y extrapolamos la potencia al cigüeñal – la forma en que se mide en coches de calle – estamos hablando de prácticamente 1.500 CV de potencia. La caja de cambios, no es secuencial, es de tipo «dogbox» – un cambio manual de funcionamiento similar al de una moto. El ancho de vías delantero es muchísimo más ancho que el trasero, con el objetivo de acomodar los enormes neumáticos de drag racing. Estos slicks llevan baja presión para maximizar el agarre en el eje delantero.
Conducir un coche de tracción delantera con tanta potencia es difícil, y es todo un reto transmitir la potencia desde el eje delantero, especialmente con un peso que ronda la tonelada. Este es un coche tremendamente rápido. En los 420 metros que tiene un cuarto de milla cruza la línea de meta a 297 km/h, en 7,94 segundos. Los coches de producción más rápidos de la historia jamás han bajado al entorno de los ocho segundos en condiciones óptimas. Este coche está al nivel de máquinas ad-hoc de drag racing con dos o tres veces su potencia.
Os recomiendo contemplar el vídeo que dejamos sobre estas líneas. Tiene un mérito tremendo lo que este pequeño equipo de aficionados ha logrado.
