Cuando creíamos que estaba todo inventado, llega Honda y pretende sorprendernos con un nuevo estilo de automóvil, que no es diésel, ni gasolina, ni híbrido. De hecho no emplea ningún combustible, ni motor de combustión interna. Pero tampoco es lo que entendemos por un eléctrico de baterías o pila de combustible, sino una combinación de ambos.
Honda se inventa un nuevo tipo de SUV
Ya hace tiempo que Honda había anticipado cómo sería su próximo coche de hidrógeno. No es menos cierto que Honda fue pionera en el desarrollo de coches de pila de combustible de hidrógeno, presentando ya en diciembre de 2002 el Honda FCX. Pero lo que hoy tenemos entre manos es aún más interesante, por sus posibilidades, y por abrir la vía a un nuevo tipo de coche.
Honda CR-V
Se llama Honda CR-V e:FCEV y dispone de 434 kilómetros de autonomía, de manera que puedas recuperarlos todos ellos en unos minutos con tan solo repostar sus depósitos de hidrógeno en una hidrogenera, tal y como haríamos con un diésel o un gasolina. Desconocemos su precio, pero el objetivo de Honda, una vez se escale su producción de pila de combustible, es que un coche de este tipo se sitúe en precios similares a los de un diésel.
Del diésel, al enchufable de hidrógeno
El Honda CR-V e:FCEV es, en esencia, un coche eléctrico, que se mueve gracias a un motor eléctrico delantero de 174 CV de potencia. Pero la gran diferencia respecto a un eléctrico de baterías convencional, o a un eléctrico de pila de combustible, reside en su capacidad para disponer de dos fuentes de energía:
- Una pila de combustible de 92,2 kW, que emplea un depósito de hidrógeno de 4,3 kilogramos a 10.000 psi para generar la electricidad con la que recargar la batería y, a su vez, mover el motor eléctrico
- Una batería compacta de 17,7 kWh, similar a la que podemos encontrar en algunos híbridos enchufables, que no solo se recarga gracias a la pila de combustible sino que también es enchufable, de manera que la podemos recargar en casa
Los pros y los contras del enchufable de hidrógeno
Según Honda, y estimaciones basadas en el ciclo de homologación en Estados Unidos, podremos recorrer 46,67 kilómetros con la batería completamente recargada y sin necesidad de que trabaje la pila de combustible y, por lo tanto, consumamos hidrógeno. Una autonomía escasa para la capacidad de esta batería, que entendemos se debe a los requisitos de funcionamiento de todo el sistema, incluida la pila de combustible que tiene que recargar la batería.
Lo interesante, sin duda, que una vez acabada esa autonomía sin consumir hidrógeno podremos seguir circulando empleando la pila de combustible hasta recorrer un total de 434 kilómetros, de nuevo según estimaciones basadas en el ciclo EPA estadounidense. Y en el momento en que hayamos agotado el hidrógeno de los depósitos, podríamos repostar hidrógeno en una hidrogenera inmediatamente, y mucho más rápido de lo que recargaríamos las baterías de un eléctrico puro, para continuar nuestro viaje, en tiempos similares a los que necesitaríamos en un diésel o un gasolina.
En la adaptación de la plataforma del Honda CR-V para disponer de la batería, y los depósitos de hidrógeno que alimentan la pila de combustible, Honda ha tenido que adaptar las suspensiones y ajustarlas a propósito para esta versión. También ha tenido que realizar la adaptación del maletero, que como se aprecia en las imágenes de este artículo no dispone de una base plana, sino en dos niveles. Aún así, podría decirse que la capacidad de carga y el espacio a bordo no se han resentido tanto como cabría esperar.
El Honda CR-V e:FCEV se comercializará, de momento, en Estados Unidos, que es también donde se fabrica (Ohio) y donde se produce su pila de combustible (Michigan), desarrollada en colaboración con General Motors.
No sabemos si Honda apostará por una solución similar en Europa en alguno de sus modelos. Pero sí que su objetivo es impulsar la economía del hidrógeno, que todas sus ventas a nivel mundial sean de vehículos completamente eléctricos en 2040 y alcanzar la neutralidad de carbono en todos sus productos y todas sus actividades en 2050.