No es un lobo con piel de cordero, es un cordero con piel de lobo. Hyundai se suma a muchos otros fabricantes de coches, que lanzan kits deportivos -tanto exteriores como interiores- para coches compactos o incluso SUV. Me vienen a la cabeza los Ford Fiesta ST Line o los Opel Astra OPC Line. En muchos casos, el tren de rodaje apenas varía, en busca sólo de mayor empaque visual. Aunque el Hyundai i30 N Line tenga el aspecto de un compacto deportivo de 200 CV, su máxima potencia son los 140 CV de un motor 1.4 T-GDi. Al menos su tren de rodaje equipa una suspensión más firme y frenos de mayores dimensiones.
Hyundai i30
Hyundai quiere incrementar la deportividad de su gama i30, que siendo realistas peca de ser algo más sobria de la cuenta. Se han inspirado en el radical Hyundai i30 N, del que ha tomado prestados algunos detalles. Por ejemplo, su calandra o sus paragolpes, si bien ligeramente suavizados -prescinden de la línea de color rojo que los subraya. Tampoco lleva las taloneras laterales del Hyundai i30 N, pero sí su paragolpes trasero. Aunque su alerón no es tan grande como el del i30 N, si está pintado de color negro y tiene unas dimensiones generosas. Dos colas de escape ponen la guinda a la zaga.
El interior del Hyundai i30 N Line parece un sitio bastante agradable para pasar los kilómetros. Su volante es igual al del Hyundai i30 N, aunque sin las características «levas» de los modos de conducción del compacto deportivos. Sus asientos son deportivos, forrados en cuero y Alcantara, con unos buenos apoyos laterales. El pomo de la palanca de cambios también procede del compacto de hasta 275 CV de potencia. A nivel dinámico y de puesta a punto, el Hyundai i30 N cuenta con unas nuevas llantas de 18 pulgadas, calzadas con neumáticos deportivos Michelin Pilot Sport 4.
Su suspensión es más firme, al igual que el tarado de su dirección asistida. Su equipo de frenado también ha sido revisado, con discos delanteros de mayores dimensiones que los Hyundai i30 de serie. Los Hyundai i30 N sólo se ofrecen con los dos motores más potentes de la gama, los diésel 1.6 CRDi de 136 CV y el 1.4 T-GDi de gasolina con 140 CV. Aunque prestacionalmente no cambian, Hyundai ha modificado ligeramente su mapa de potencia, mejorando su respuesta, haciéndola más instantánea. Si unimos esto a un tono de escape más sugerente, el resultado puede ser interesante -a falta de poder probarlo.