En Diariomotor no nos cansaremos de repetirlo una y otra vez. No compartimos la moda que parece haber inundado el sector del automóvil, una peligrosa moda que ha reemplazado multitud de controles físicos del interior de un coche por pantallas y superficies táctiles. En cuanto a limpieza de líneas y diseño interior puede ser una gran idea, pero la realidad es que operar estos controles a través de superficies táctiles nos obliga a apartar la vista de la carretera. Aunque esta tendencia en el diseño de interiores de coches parece imparable, algunas marcas nadan contracorriente.
Y ese ejemplo es Honda. Honda ha hecho lo que ninguna marca ha hecho hasta la fecha, pasar de controles táctiles de climatización a controles físicos. Ha ocurrido en el Honda Jazz, su peculiar monovolumen urbano. El lavado de cara de su anterior generación había reemplazado los controles físicos del climatizador por superficies táctiles, al menos en las versiones con climatizador bizona. Aún seguía disponiendo de un módulo diferenciado para estos controles, pero ya no había ruletas o botones físicos: solo controles táctiles en una superficie capacitiva. Definitivamente, obligaban a apartar la vista de la carretera.
Honda Jazz
En Diariomotor preferimos que este tipo de controles sigan teniendo mandos específicos a que estén enterrados en un menú en la pantalla del sistema de infotainment. Honda afirma que ha escuchado a sus clientes y en la nueva generación del Honda Jazz ha recuperado mandos físicos para la climatización. Ruletas giratorias y grandes botones para regular el flujo de aire y su temperatura. En nuestra opinión un verdadero acierto de cara a la seguridad del pasaje: es posible accionar estos controles sin separar la vista de la carretera. Están donde deben estar y reaccionan físicamente al tacto.
Podría discutirse que algunos sistemas que han reemplazado estos mandos por pantallas con respuesta háptica – que vibran o emiten un chasquido – no son tan malos, pero la realidad es que siguen obligándonos a desviar la vista de lo importante. También hay que tener en cuenta que el público objetivo del Honda Jazz no son solo personas jóvenes, si no que en gran parte son personas entradas en años que no quieren tecnologías complicadas. Y sí, estaríamos en lo cierto. Pero la realidad es innegable: solo un control por voz verdaderamente eficaz es más seguro que un botón de toda la vida.
Un detalle curioso para terminar este artículo. El Honda e, el coche más digitalizado y futurista de Honda, tiene seis pantallas en su interior, e incluso sus retrovisores son digitales. Sin embargo, tanto el volumen del sistema de sonido como los mandos de la climatización son ruletas físicas.
Fotos del Honda Jazz 2020