Poco a poco se va haciendo realidad la propuesta de electrificación de Maserati, una marca que lleva varios años envuelta en un completo proceso de transformación. La estrategia incluye el lanzamiento de modelos nuevos y la renovación completa de los actuales, pero el primer paso es el lanzamiento de una versión hibrida de un modelo actual. Así, la firma acaba de desvelar el Maserati Ghibli Hybrid, que llega para complementar la gama del pequeño de los sedanes de la marca. El Maserati Ghibli se convierte en el modelo de la gama de Maserati que más variedad mecánica tiene, con la presencia de dos motores de gasolina, uno diésel y una configuración hibrida.
La mecánica hibrida es una apuesta atrevida por parte de Maserati, tanto por su configuración como por cómo queda posicionada en la gama. La parte de combustión interna viene dada por un motor 2.0 de cuatro cilindros turboalimentado, un motor novedoso en la gama Maserati del que no han trascendido detalles sobre su origen. No se trata de un híbrido tradicional sino un mild-hybrid en el que la hibridación se basa en la instalación de un sobrealimentador (supercharger en inglés) eléctrico alimentado por un alternador de 48V. Maserati ha admitido que ha valorado la opción de un híbrido enchufable, pero se decantaron por un mild hybrid para evitar un peso excesivo y mantener la deportividad y el dinamismo de los que presume el modelo.
Maserati Ghibli
De hecho, aseguran que el peso de este Maserati Ghibli Hybrid es 80 kg inferior al del Ghibli Diesel. La combinación mecánica del Maserati Ghibli Hybrid proporciona 330 CV y un par máximo de 450Nm disponible desde solo 1,500rpm. La transmisión es automática de ocho velocidades y transmite la potencia a las ruedas traseras con ayuda de un diferencial mecánico de deslizamiento limitado. Permite alcanzar los 100 km/h en 5.7segundos y la velocidad máxima es de 255 km/h.
A pesar de que la hibridación busca mejorar el rendimiento más que mejorar consumos, el Ghibli Hybrid no se sitúa como tope de gama, sino que queda como la oferta de acceso en gasolina. Si el precio acompaña, esta versión puede hacer daño a las ventas de la motorización diesel.
Estéticamente ha sido dotado es una serie de elementos diferenciadores para identificar su naturaleza híbrida. Las branquias laterales, las pinzas de freno y el rayo del logotipo en el pilar C van en color azul. Este mismo color se repite en el interior, concretamente en las costuras de los asientos y en la iluminación. Cabe destacar que tanto la parrilla como los faros delanteros y traseros ven su diseño modificado, una mejora que seguramente veamos en el resto de mecánicas de la gama Ghibli.
Fuente: Maserati
En Diariomotor: