Muy pronto solo habrá una posibilidad de comprar un smart nuevo, la de adquirir un smart eléctrico. Mercedes-Benz aún no plantea una estrategia tan ambiciosa, pero sí la de incluir alguna suerte de electrificación en todas sus líneas de producto. En 2022 se espera que Mercedes-Benz cuente con 130 versiones de sus coches con algún tipo de electrificación y, por ende, motores eléctricos y baterías. De ahí que para una marca como esta, y para un grupo tan importante como Daimler, sea imprescindible asegurar su estrategia para fabricar millones de coches eléctricos en los próximos años.
Daimler acaba de anunciar que ha adquirido celdas de baterías por valor de 20.000 millones de euros. Estas celdas se emplearán, como decíamos, en diferentes soluciones de electrificación, que van desde híbridos y micro-híbridos, hasta híbridos enchufables y eléctricos.
Baterías para producir millones de coches eléctricos y enchufables
Mercedes-Benz Mercedes EQC
Es difícil hacer una estimación del número de coches que podrían fabricarse con este suministro de baterías, sobre todo si no sabemos el coste de las celdas, por kWh, y los coches que equiparán estas baterías cuentan con tecnologías tan variadas. Pero sí parece que estimando un coste entre los 100$/kWh – Tesla espera que las baterías del Model 3 se abaraten incluso más en el corto plazo – y los 200$/kWh, podría decirse que Mercedes-Benz habría garantizado el suministro de baterías para cientos de miles de coches eléctricos como el Mercedes EQC y millones de coches eléctricos pequeños, como los de smart, e híbridos enchufables.
Según Mercedes-Benz, con esta adquisición pretende cubrir el suministro de baterías para coches con diferentes tecnologías de electrificación hasta 2030.
Únicamente en la producción y ensamblado de baterías, Mercedes-Benz invertirá más de 1.000 millones de euros. Las celdas que habrían adquirido se ensamblarán en ocho fábricas diferentes distribuidas en tres continentes, empezando por la de Kamenz, en Alemania, donde ya se están fabricando baterías, y otra más que comenzará a producir a principios de 2019. Mercedes-Benz también ensamblará baterías en Stuttgart, en Sindelfingen y en Pekín (China), Bangkok (Tailandia) y Tuscaloosa (Estados Unidos). La marca destaca la importancia de ensamblar las baterías localmente, y en fábricas distribuidas en Europa, Asia y Estados Unidos, para maximizar la flexibilidad y la eficiencia de la producción, un factor importante en productos como los coches eléctricos, que requieren una inversión muy cuantiosa, y donde los márgenes para amortizar dicha inversión son pequeños.
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