Uno de los puntos a favor que tiene el Mazda MX-5 es el amplio catálogo ‘aftermarket’ con el que se puede retocar y mejorar el biplaza de Mazda. Son muchas las compañías que ofrecen kits para transformar este clásico roadster en algo aún más puro o más salvaje. El MX Speedster, de Xenex Motorsports, entra dentro de la última categoría porque hace realidad la loca idea de crear un Miata con un V8.
Nada tiene que ver con el MX-5 Speedster Evolution que Mazda presentó en 2016 basándose en la cuarta generación (ND) de su deportivo. Este proyecto comenzó después: fue en 2018 cuando el diseñador Kasim Tlibekov publicó su particular visión del Mazda MX-5 NA. Aquella interpretación no pasó desapercibida para Xenex Motorsports (una empresa estadounidense especializada en la restauración y modificación de vehículos), que se puso en contacto con su creador para hacerla realidad.
Conversión total
Mazda MX-5
Después de un año de trabajo, el MX Speedster está a punto de hacerse realidad. La idea va más allá de un simple kit de carrocería: convierte, por completo, el Mazda MX-5 a través de uno de los procesos de transformación más locos vistos hasta el momento.
El MX Speedster pierde 113 kilos respecto al Mazda MX-5 NA sobre el que se asienta. Y lo hace gracias a una carrocería hecha a medida que recuerda, inevitablemente, a los antiguos modelos de Le Mans. El ‘nuevo’ Miata pierde el parabrisas y estrena faros (delanteros y traseros) de LED con un diseño minimalista. También es nuevo el paragolpes delantero y el difusor trasero, que incorpora una salida de escape a cada lado. Las vías han sido ensanchadas y bajo esas formas redondeadas es complicado encontrar al modelo donante. De manera opcional se pueden montar llantas de 17 pulgadas así como frenos Wilwood y un sistema de suspensiones orientado a circuitos.
Hazlo tú mismo
El plan de Xenex es vender su kit de carrocería (compuesto por una docena de paneles y piezas de fibra de vidrio) para que sus clientes lo monten por su cuenta. Creen que con cierta capacidad podrán hacerlo y, además, les facilitarán unas instrucciones en vídeo para que les guíen en todo el proceso. Y si alguien necesita conservar alguno de los componentes original para cumplir con la normativa, como, por ejemplo, el parabrisas, le explicarán cómo llevar a cabo las modificaciones necesarias. Por si alguien se lo pregunta: un taller también podría realizar todo este trabajo.
Un V8 firmado por General Motors
En esas dos primeras versiones (hay cuatro), el motor se mantiene sin cambios: contamos, por lo tanto, con el cuatro cilindros en línea atmosférico de 1.6 o 1.8 litros. El tercer nivel del MX Speedster añade una S a su nombre y un compresor de 20 kilos firmado por según Fastforward Superchargers. Con su presencia, la potencia se va hasta los 171 CV (1.6) o hasta los 203 CV (1.8).
En lo más alto de la gama, aparece el MX Speedster RS que sustituye el motor original del Mazda MX-5 por un V8 de General Motors que procede de la conocida serie LS y transforma el Miata en un deportivo completamente diferente. No en vano, entrega sus 355 CV de potencia a 6.800 rpm. Según Xenex, la comercialización está programada para principios de marzo de 2023 y, de momento, nada se sabe sobre el precio.
Imágenes: Kasim Tlibekov