Uno de los 4×4 más queridos y reputados del mercado está preparando su regreso a las calles. Confirmado su lanzamiento y con el punto de mira puesto en coches como el Toyota Land Cruiser o el Land Rover Discovery, este SUV con verdaderas capacidades todoterreno quiere recuperar un tipo de vehículo 4×4 que ya creíamos extinto.
El regreso del Jeep Cherokee ya está en marcha
Aunque la gama Jeep no para de crecer en cuanto a modelos y carrocerías, no es menos cierto que entre todas estas novedades llevábamos tiempo echando de menos un 4×4 histórico de la marca. Nos referiremos por supuesto al Jeep Cherokee, un modelo que en 2023 abandonó el mercado, pero que Stellantis ha decidido resucitarlo de cara a 2026.
Ubicado entre los modelos Compass y Grand Cherokee, el nuevo Jeep Cherokee quiere defender un planteamiento que por desgracia es muy poco habitual en el mercado actual. Pues su objetivo es combinar lo mejor de los SUV y los todoterrenos en un coche capaz de adaptarse a todo tipo de usos, manteniendo también unas capacidades 4×4 sobresalientes para poder off-road con plenas garantías.
Desarrollado sobre la nueva plataforma STLA Large de Stellantis, el nuevo Cherokee será fabricado en Norteamérica y tiene muchas posibilidades de llegar a mercados como el europeo gracias a que podrá emplear motores gasolina microhíbridos, híbridos enchufables y 100% eléctricos. No habrá opciones diésel, un tipo de motor que ya ha desaparecido de toda la gama Jeep en el viejo continente.
Uno de los puntos más interesantes en este nuevo Cherokee, y que además confirman las primeras unidades que han sido avistadas del modelo durante sus fases de pruebas, es que siguiendo con la tradición de Jeep, tendremos un Jeep Cherokee Trailhawk. La firma está comprometida con este tipo de versiones en pos de diferenciarse de todos sus rivales, pudiendo sumar incluso el sello «Trail Rated» en pos de marcar aún más distancias con cualesquiera de sus alternativas.
Este nuevo Jeep Cherokee Trailhawk beberá del diseño del Grand Cherokee que podéis ver en las imágenes que acompañan este post, no así de su sistema grupo motopropulsor. Dicho esto podemos dar por hecho que contaremos con un sistema de tracción 4×4, la posibilidad de contar reductora y al menos bloqueo del diferencial trasero, un control de tracción con diferentes modos de conducción específicos para off-road, así como una suspensión y neumáticos más preparados para hacer conducción todoterreno. A todo esto tendremos que sumar una mayor altura libre al suelo y unos mejores ángulos característicos que los Cherokee convencionales.
Sea como fuere, a finales de este año está previsto que Jeep comience a desvelar los primeros detalles sobre esta nueva generación del Cherokee y las fechas en las que lo poderemos ver rodando por las calles.
