Durante los últimos meses se ha producido el establecimiento de una marca/conglomerado chino en España, uno en particular entre varias marcas procedentes del mismo país que han llegado a nuestro mercado. Una de ellas está dispuesta a fabricar, pero a ojos de la ley, sus coches eléctricos serán más españoles que chinos. O, mejor dicho, requieren que lo sea.
Chery y EV Motors harán del Omoda 5 eléctrico ‘un coche europeo’
Tras el desembarco de Chery en España, con los primeros Omoda 5 llegando en 2023, este año se firmaba un acuerdo con EV Motors (Ebro) para aliarse y dar tanto a Omoda como a Jaecoo un hogar en la Zona Franca de Barcelona. Una alianza que les da un hogar a Chery para traer tanto el Omoda 5 2025 como su homólogo eléctrico, así como los Jaecoo 7, 8 y el Jaecoo 5 eléctrico que llegará a Europa.
Omoda 5
Siendo fruto de un conglomerado chino y materializándose gracias a capital chino, es fácil entender a estos coches como chinos. Ahora bien, a ojos de la ley, el objetivo de Chery es que sean considerados más españoles (europeos, en definitiva) que chinos, de modo que se considere fabricación local y no estén sujetos a los aranceles de la Unión Europea a los coches eléctricos procedentes de China. Y, por supuesto, tienen un método.
Ya el pasado mes de septiembre, EV Motors anunció un cambio de planes: el Omoda 5 eléctrico será producido (a partir de octubre de 2025) en CKD (Complete Knock Down) en lugar de DKD (Direct Knock Down) con materiales a ensamblar procedentes de China, como estaba previsto y como se va a hacer con los Ebro S700 y S800 a partir de este mes de noviembre. Entre estos dos Ebro, EV Motors prevé fabricar unas 15.000 unidades a través de sus decenas de puntos de venta ya existentes a lo largo y ancho de nuestro país.
Dado que es CKD, las piezas tendrán que ser soldadas, pintadas y reensambladas en Zona Franca, lo que requerirá la presencia de suministradores locales. Esto no sólo tiene la ventaja de reducir costes de importación y productividad, como apuntaba el presidente de EV Motors Rafael Ruiz, sino que también cumpliría las condiciones de la Unión Europea para que un coche se considere que es de producción local, en vez de considerarse importado (Automotive News Europe).
El Omoda 5 eléctrico ya está disponible en España desde 33.242 €
Es preciso recordar que el Omoda 5 eléctrico es más que una simple conversión del de gasolina, sino que cuenta con un morro completamente nuevo, con un Cx de 0,281. Su motor, conectado a las ruedas delanteras, otorga 204 CV de potencia y 340 Nm de par motor, siendo capaz de pasar de 0 a 100 km/h en 7,6 segundos, con una velocidad punta de 172 km/h. Cuenta con tres modos de conducción: Eco, Normal y Sport. Además, mide 51 mm (4.424 mm de largo, mientras que la anchura y altura son iguales), su batalla es 20 mm mayor (2.630 mm) y tiene 380 l de maletero, 10 más que el normal.
La batería de LFP (ferro-fosfato de litio) de 61,05 kWh de capacidad neta son las Blade de BYD, que admiten una carga rápida de hasta 80 kW en DC que permite llenarla del 30% al 80% en 28 minutos. El consumo medio homologado es de solo 15,5kWh/100km y la autonomía alcanza hasta 430 km en ciclo WLTP. Aunque no se fabrique (aún) en España, se ofrece en el mercado desde 33.242 € (con las ayudas del Plan Moves ni descuentos), con una cuota de 199 euros al mes, con un nivel de acceso Comfort y un tope de gama Premium.
Si esta vía funciona y el Omoda 5 eléctrico se considera fabricado en Europa, sentaría un precedente interesante para todos los fabricantes chinos, un camino que seguir para vender a un precio más competitivo sus coches eléctricos. BYD ya está en marcha con sus planes de fabricar en Hungría, sin ir más lejos. Evitaría no sólo los aranceles, sino situaciones tan particulares como la que sufrió DR en Italia, recibiendo una multa de 6 millones de euros por el ensamblaje de modelos de Chery, JAC y BAIC en suelo italiano, comercializando un producto en esencia chino como italiano.
Obviamente, no solo permite que el Omoda 5 eléctrico, con ese precio desde 33.242 € con ayudas incluidas, fuese competitivo en el mercado como lo está siendo su homólogo de combustión, con muy buena aceptación en el mercado español en este 2024. También abre las puertas al Jaecoo 5 y futuros modelos de Ebro que cuenten con propulsión similar.