Esta es una prueba diferente del Dacia Duster 2019. Probamos el Dacia Duster 1.3 TCe de 130 CV con tracción delantera y cambio manual, en acabado Prestige, pero vamos a enfocar el análisis de una forma algo diferente a una prueba clásica. Muchos de los posibles compradores de este coche se encuentran con un vehiculo grande, atractivo, potente y bien equipado a un precio tan bajo respecto a sus posibles rivales que les hace dudar. ¿Por qué es tan barato el Dacia Duster? ¿Es un buen coche del que me puedo fiar a pesar de su precio?. Vamos a intentar resolver, antes de nada, esa gran pregunta.
¿Por qué es tan barato el Dacia Duster?
Para explicar por qué es tan barato un Duster hay que empezar por la propia marca. Dacia nació con la idea de fabricar coches baratos desde el primer momento, o al menos así la refundó el grupo Renault-Nissan. Todo está pensado desde el principio con el coste como máxima prioridad.
Dacia Duster
Como marca, Dacia no tiene red de concesionarios propios, sino que vende a través de la red Renault. Tampoco invierte en investigación y desarrollo, toda su tecnología ha sido previamente desarrollada, probada y comercializada por Nissan-Renault y es heredada por Dacia a un coste mucho menor, especialmente los motores Renault y el resto de componentes mecánicos como transmisiones. Pero centrémonos en el coche en sí.
Plataforma común: todos los modelos de la gama Dacia (Sandero, Logan, Lodgy, Dokker y Duster) comparten una única plataforma, que es específica de Dacia pero que deriva de la antigua plataforma del Renault Clio III. Puesto que el elemento más caro de desarrollar en un vehículo nuevo es su plataforma y esta está totalmente amortizada, el Duster comienza con un coste de su estructura mucho más bajo que el de casi cualquier otro coche.
Cámaras, Radar, Lidar: El Duster, y todos los Dacia hasta ahora, carecen de las ayudas a la conducción que dependan de las cámaras estereoscópicas frontales y sensores por ondas electromagnéticas. Estas ayudas que no pueden llevar incluyen el asistente de mantenimiento de carril, la frenada autónoma de emergencia, la detección de peatones, el control de crucero adaptativo o el reconocimiento de señales de tráfico, entre otros.
Tres estrellas EURONCAP: en las pruebas realizadas en 2017, cuando se lanzó la actual generación del Duster, obtuvo tres estrellas EURONCAP sobre cinco posibles, cuando la mayoría de sus rivales obtienen todas las estrellas. Esto es consecuencia de su plataforma y de la ausencia de esas ayudas a la conducción de última generación. El Duster habría obtenido cinco estrellas hace tan solo unos pocos años, pero ahora mismo con los estándares actuales se queda un peldaño por debajo de coches con una plataforma más moderna y con todas las ayudas a la conducción que existen.
Entrando ya en elementos concretos de fabricación, nos encontramos con faros convencionales en toda la gama, paneles exteriores sencillos, cerradura mecánica en la puerta del conductor, espejos sin plegado automático ni intermitente, frenos traseros de tambor en toda la gama o unas ópticas traseras de una sola pieza que no se integran en el portón.
Ya en el interior, Dacia ha buscado soluciones ingeniosas para reducir el coste en cada elemento, como por ejemplo los los mandos compartidos con Renault de diferentes generaciones, los plásticos duros en el salpicadero, el tirador mecánico para abrir el depósito de gasolina, el mando mecánico de altura de luces, el freno de mano de palanca, el cuentavueltas sin línea roja (válido para gasolina y diésel) o los aireadores de una sola pieza.
En el módulo de infoentretenimiento, común a toda la gama Dacia y con una instalación similar a la de un autorradio de los de antes, mediante un módulo cuadrado, encontramos una pantalla de pequeña, de baja resolución y un puerto USB situado muy alto en la consola central. El cable del teléfono pasa por delante de la pantalla y no queda muy estético, pero sería más caro pasar un cable hasta la parte inferior de la consola.
Cabe destacar que el Duster sí está a la última en conectividad, contando con Apple Car Play y Android Auto, aunque sea en una pantalla algo limitada. Esto significa que podremos utilizar la música y el navegador del teléfono con una interfaz sencilla y amigable, además de cualquier otra aplicación que esté disponible para coche.
Todo esto ¿convierte al Dacia Duster en un mal coche?
Esta sería, quizás, la gran pregunta. Sabemos que es un coche barato y sabemos por qué, pero ¿es un coche recomendable?
Después de haberlo probado en diferentes ocasiones, la última de las cuales ha sido ya con la gama 2019, mi sensación es que el coche es perfectamente recomendable. La «magia» de Dacia consiste en que todo lo que le han quitado son elementos sin los que puedes vivir sin problema. No será tan lujoso o tan atractivo como otros modelos, pero es un coche sólido y fiable que lleva bastante menos electrónica que sus homólogos de Renault, sin ir más lejos, y por tanto tiene menos cosas que puedan fallar.
La cuestión es que puedes convivir un freno de mano de palanca, con el mando de los retrovisores de un Clio de hace 10 años (que funciona bien y no es feo) y con los sistemas de seguridad más avanzados que había hace 5 ó 6 años. Y con ello te vas a ahorrar miles de euros en la compra y mantenimiento del coche.
Me consta que existen otros ahorros de coste más allá de lo evidente, como la sujección de las defensas o los plásticos utilizados sin imprimación de fábrica, pero incluso en eso se ha llegado a un punto razonable de calidad mínima pero suficiente con la que el coche puede durar muchos años sin problemas.
Comportamiento dinámico del Duster 1.3 TCe 130
Con respecto a la nueva generación de motores de gasolina, este nuevo 1.3 será posiblemente el motor más vendido, en versión 4×2 como la que estamos probando. Es un motor silencioso, no consume mucho y mueve con agilidad el coche, aunque es verdad que hay que estirarlo por encima de las 2.200 rpm para que empiece a empujar con ganas. Esta falta de progresividad se ve compensada con una buena facilidad para subir de vueltas y un empuje final más que suficiente para mover un conjunto que ronda los 1.250 kg.
Lo que no ha cambiado es el tacto y el comportamiento del coche. La dirección es algo lenta, con una fuerte desmultiplicación y no es demasiado comunicativa, así que ya de entrada el Duster invita a una conducción tranquila, propia de un coche familiar y alejada de cualquier pretensión deportiva.
La suspensión es blanda, al igual que los asientos, que no recogen demasiado los movimientos laterales del cuerpo, así que las curvas fuertes no son definitivamente lo suyo.
Lo que sí hace bien el Duster es recorrer kilómetros con gran silencio y comodidad a velocidades medias y ahí es donde saca todo su talento como viajero tranquilo. Lo veo un coche sin demasiada alma en carretera, pero recomendable para viajeros que busquen espacio, economía y ritmos legales sin grandes emociones, que por otro lado es el público objetivo y la gran mayoría de conductores.
La faceta 4×4 del Dacia Duster
No podemos terminar una prueba del Dacia Duster sin al menos mencionar sus aptitudes para el 4×4.
En este caso probamos un gasolina 4×2, que sería justo lo contrario de lo que habría que comprarse para disfrutar de este coche en el campo: un diésel 4×4. Aún así el Duster mantiene unas cotas formidables tanto de altura al suelo como de ángulos de ataque, salida y ventral, muy por encima de cualquier otro SUV asimilable. Esto nos va a permitir circular por caminos en muy mal estado con las máximas garantías.
Lógicamente, sería la versión 4×4 la que podríamos disfrutar mucho más en campo, y entonces sí que tendríamos un coche bastante más atractivo como vehículo de ocio, ya que el Duster presenta unas cualidades sobresalientes para alejarse del asfalto de verdad.
Conclusiones
El Dacia Duster es un coche low-cost que ha sido pensado desde el primer minuto para ser lo más barato posible. En mi opinión, su gran mérito es que Dacia lo ha conseguido sin sacrificar nada esencial, sino cosas que no se ven o que son funcionales tal como están.
Tal vez su mayor pega es no disponer de la última generación de medidas de seguridad, más allá de pequeños detalles de equipamiento, pero incluso en eso creo que es un coche honesto, que nos propone una solución que estaría en la vanguardia del mercado hace muy pocos años y que ahora, simplemente, es de penúltima generación.
Por lo demás, el atractivo del coche, su completo equipamiento, su gran espacio interior con 445 litros de maletero y sus cualidades ruteras, lo convierten en un coche familiar cómodo y económico en todos los sentidos que sí me atrevería a recomendar, especialmente si va aderezado con tracción 4×4 y un motor diésel que incremente el par a bajo régimen, con lo que se convierte en el SUV más todoterreno del mercado por un amplio margen.