Si piensas en el Volkswagen más icónico posiblemente pienses en un Volkswagen Beetle o en un Volkswagen Golf. Pero lo cierto es que su saga de furgonetas es tan mítica como ellos. Llevan más de 7 décadas a la venta – desde el año 1949, que se dice pronto – y hoy vamos a probar su última generación, la T7, en su versión Multivan. Una Volkswagen Multivan T7 que es el último clavo en el ataúd del Volkswagen Sharan, y que podría incluso suponer una sería amenaza para grandes SUV como el Volkswagen Touareg o el Volkswagen Tiguan Allspace. El por qué, te lo cuento a continuación en esta prueba, acompañada de un completo vídeo.
Diseño de la Volkswagen Multivan T7
De un primer vistazo, la Volkswagen Multivan parece menos furgoneta, y más monovolumen. Aunque mantiene unas formas cuadriculadas y detalles imprescindibles como puertas correderas, su cara visible es más amable y se acerca a las que podemos encontrar en la familia de eléctricos de la marca o su hermana pequeña, la Volkswagen Caddy. Su diseño es más aerodinámico y más vanguardista que el de las T6.1, y si tengo que emitir mi opinión personal, la parte de su diseño que más me gusta es su carrocería bitono, un claro homenaje a las Volkswagen T1 y T2.
Volkswagen Multivan
La Multivan se venderá en dos versiones, corta y larga, con medidas de 4,98 y 5,18 metros. Ambas comparten una batalla de 3,12 metros, estando su principal diferencia en el voladizo trasero. Es casi 5 cm más baja que su predecesora, con una altura de 1,90 metros. Esta menor altura ha hecho que podamos comenzar la presentación en el parking del aeropuerto de Frankfurt, donde antes no entraba por altura.
Interior de la Volkswagen Multivan T7
La primera gran diferencia con respecto a las T6.1 llega al subirse al puesto de conducción de la furgoneta. No hay que subirse a la furgoneta, si no auparse ligeramente, quedando a la altura de un todocamino. De un primer vistazo, el salpicadero resulta familiar: si te has subido en un Volkswagen Golf de última generación te sentirás como en casa. Por fortuna, la gran superficie acristalada y la casi total supresión de la consola central hace que la sensación de espacio sea más que una sensación. A esta sensación tan diáfana contribuye un enorme techo panorámico, la primera vez que una Multivan puede equipar este elemento.
La palanca de la caja de cambios está situada ahora junto al volante – es una de esas pequeñas “maquinillas” tan discretas – y el freno de mano, que es eléctrico, se desplaza a la parte inferior de la consola central. La consola está repleta de huecos de almacenamiento de gran tamaño: dos enormes portabebidas abatibles, una superficie de carga inductiva para teléfonos móviles, puertas con grandes espacios portaobjetos, una guantera doble e incluso una mesa central, montada sobre raíles: si la desplazamos hacia delante, tenemos tres portabebidas adicionales. La instrumentación de la Multivan T7 puede tener hasta 10,25” y destaca por sus grandes posibilidades de configuración y personalización.
Es fluida y tiene unos gráficos cuidados. La pantalla del sistema de infotainment tiene 10 pulgadas en todas sus versiones y aunque tiene una buena visibilidad, su curva de aprendizaje es muy considerable. Por fortuna, es mucho más fluida que en otros vehículos que hemos probado recientemente en Volkswagen. Siguiendo modas, esta pantalla integra las funciones de climatización, y de forma inexplicable, el selector táctil de volumen y ajuste de temperatura sigue sin estar retroiluminado. En mi opinión, un gran fallo. El sistema de infotainment se actualiza de forma inalámbrica, y está siempre online gracias a una eSIM, permitiendo que nos “conectemos” al coche desde la app de smartphone WeConnect.
En las versiones enchufables, sin ir más lejos, nos permitirá controlar o programar la carga de su batería. En lo tocante a calidades, todo lo que podemos ver y tocar es plástico duro, detalle que no nos importa demasiado en un vehículo familiar. Es de corte sufrido y está bien ajustado, y por fortuna, el negro piano está reducido a la mínima expresión: solo lo encontrarás en los accesos directos del sistema de infotainment y en el mando de las luces.
¿Cómo se viaja en la Volkswagen Multivan T7? Así son sus plazas traseras
Para averiguarlo, pasamos a las plazas traseras. Sigo pensando que una furgoneta es el vehículo más cómodo y apropiado para viajes de larga distancia, y la primera demostración es que acceder a las plazas traseras es juego de niños, gracias a las enormes puertas correderas eléctricas. Una vez atrás tenemos una disposición de cinco asientos individuales. Estos asientos cuentan todos ellos con anclajes ISOFIX, y van montados sobre un efectivo sistema de raíles. Sistema, por cierto, electrificado, que permite que los asientos laterales puedan ser calefactados en la segunda y tercera filas. Aunque se venderá con siete plazas de serie, si solo queremos seis plazas, Volkswagen nos descontará el importe de ese asiento de la factura final.
En todas las plazas el espacio para piernas, cabeza y hombros es excepcional, y es amplio para adultos de talla y estatura grandes – como es el caso de un servidor. Creo que uno de los principales alicientes de esta Multivan T7 es la versatilidad que ofrece a la hora de diseñar el habitáculo. Podemos hacer configuraciones 2-2-3, 2-3-2, 2-1-3 o lo que se nos ocurra. Podemos sacar asientos de forma individual para cargar bicicletas o canoas, o podemos sacarlos todos para tener un espacio de carga de 4 metros cúbicos, suficiente para una mudanza. Ah, y esa mesa de la que os hablaba antes también va sobre raíles, contando con dos mesitas extraíbles, ideales si queremos comer algo, o ir trabajando mientras viajamos.
El acceso a las plazas traseras es fácil, y se puede hacer desde la fila central o abatiendo los asientos de la segunda fila, además de tener la posibilidad de desplazarlos hacia delante. Hemos tenido la posibilidad de viajar en las plazas traseras durante casi una hora, y podemos certificar su excelente comodidad y espacio en condiciones absolutamente realistas. Incluso los asientos de la tercera fila pueden contar con calefacción, además de amenidades como puertos de carga y aireadores para la climatización.
El espacio de carga es otro de los puntos fuertes de la Volkswagen Multivan T7 2022. Con las siete plazas en su posición más atrasada, el maletero es de 469 litros en la versión corta, y de 763 en la versión larga – medidos hasta el techo, según la nota de prensa. Si necesitamos más maletero, podemos mover los asientos hacia delante sin perder apenas espacio interior. Si quitamos la última fila, tras segunda fila tenemos entre 1,8 y 2 metros cúbicos de espacio, y si quitamos todos los asientos traseros, la cifra se dispara a entre 3,6 y 4 metros cúbicos. La boca de carga es muy ancha, pero el portón, que tiene más de un metro de alzada, no cuenta con una práctica luneta móvil, detalle que nos facilitaría la vida en aparcamientos estrechos.
Al volante de la Volkswagen Multivan T7
Al auparme al puesto de conducción, ya advierto que la postura de conducción ha cambiado de forma notable. No solo porque vamos algo más bajos, si no porque el volante no está tan echado hacia delante como en las T6.1. Su postura es más propia de un SUV que de una furgoneta. Y sin embargo, su visibilidad, gracias a las formas de su carrocería y los gigantescos cristales, es excelente. Al estar construida sobre la plataforma MQB y no sobre la plataforma T de las Transporter, es un 50% más rígida que la anterior Multivan y es 204 kilos más ligera, gracias al uso de aceros de alta resistencia, pero también a las llantas de aleación forjadas y a la estructura más ligera de los asientos. Con todo, no es precisamente un peso pluma.
La mas ligera pesa 1.941 kilos. Volkswagen ha trabajado también la aerodinámica, en aras de reducir los consumos: el coeficiente aerodinámico pasa de 0,35 a 0,30, y con ello, afirma que las emisiones reales de CO2 caen en 8 g/km. La gama de motores es relativamente escueta: consiste en dos gasolina, un 1.5 TSI de 136 CV y un 2.0 TSI de 204 CV, un 2.0 TDI diésel de 150 CV y por primera vez en VWN (Volkswagen Nutzfahrzeuge, Volkswagen Vehículos Comerciales) una versión eHybrid enchufable. Esta versión tiene 218 CV y combina un motor 1.4 TSI, un motor eléctrico de 116 CV y una batería de 10,4 kWh de capacidad neta, con la que es capaz de recorrer 46-50 km en modo 100% eléctrico según el ciclo WLTP.
Nuestra prueba tuvo como protagonista únicamente al motor 2.0 TSI de 204 CV, un motor cuyo empuje resulta suficiente, pero que no tiene reacciones intensas en esta pesada Multivan. Está bien aislado del habitáculo, cuyo aislamiento acústico es correcto, sin llegar a ser excelente como el de la Mercedes Clase V. El comportamiento de la Multivan T7 es ahora mucho más ágil que el de su predecesora. Sin llegar a ser un coche dinámico o de reacciones deportivas – no es ni de lejos su ambición – podríamos decir sin miedo a equivocarnos que tiene un tacto de conducción muy similar al de un todocamino. Ha mejorado mucho el tacto de la dirección, y aunque su suspensión es cómoda, sujeta la carrocería con firmeza y aplomo.
Ahora bien, en cuanto a consumos, la unidad probada fue imposible bajarla de 11 l/100 km. Que fuese una 2.0 TSI de 204 CV tenía mucho que ver. Personalmente, pienso que un vehículo así tiene mucho mas sentido con motor diésel – cuyo consumo real rondará los 7-7,5 l/100 km – o la versión enchufable, si su uso va a ser fundamentalmente urbano y nos la podemos permitir. A falta de una prueba de larga duración, la Multivan nos ha dejado un buen sabor de boca a nivel dinámico, y esperamos pronto poder probar las versiones eHybrid y TDI, que serán las más vendidas en nuestro país con diferencia.
Una de las grandes ventajas de que esta Multivan mida 1,91 metros es que entrar en muchos aparcamientos será menos problemático. Las anteriores rayaban los dos metros de altura, y en ciertos aparcamientos no podían entrar por altura. Con todo, una altura de 1,91 metros sigue excluyéndonos de parkings antiguos. Este mal, me temo, es común a todas las furgonetas de su categoría.
Seguridad activa de las Volkswagen Multivan T7
Uno de las principales ventajas del paso a la plataforma MQB de las Multivan es poder acceder sin restricciones a todas las asistencias a la conducción de Volkswagen. Aunque la T7 es una furgoneta, puede equipar el avanzado sistema Travel Assist, un sistema de conducción semi-autónoma, consistente en un control de crucero adaptativo con función de centrado en el carril, así como la posibilidad de reiniciar la marcha por sí mismo tras habernos detenido.
A este sistema se une un sistema IQ.Light de faros LED matriciales, cámaras en 360 grados, un avanzado asistente anticolisión con ayuda en intersecciones, un asistente de salida segura del vehículo y comunicación Car2X con la infraestructura viaria.
Conclusiones y precios
Tras haber probado la Volkswagen Multivan T7 tengo muy claro que es uno de los mejores vehículos familiares del mercado. Es la mejor alternativa a un SUV si necesitas espacio de verdad, y si te molesta que te digan que conduces una furgoneta, esta Multivan es menos furgoneta y más monovolumen que nunca. Su uso ideal, en mi opinión, largos viajes en familia o con amigos, ya que siete personas y su equipaje viajarán en primera clase en su interior.
Entre sus atributos no solo está el espacio, si no su modularidad interior y su practicidad, aun perdiendo la banqueta trasera que algunos podían convertir cómodamente en una cama. En cuanto a lo menos positivo, el control de su sistema de infoentretenimiento, la ausencia de una luneta practicable trasera y la carencia de microhibridación en sus mecánicas convencionales. Las Volkswagen Multivan T7 no son baratas, pero con respecto a las T6.1 tienen una mejor relación calidad-precio, ya que la marca valora en 5.000 euros el equipamiento extra que llevan con respecto a ellas.
La versión de acceso arranca en 48.035 euros, con el motor 1.5 TSI de 136 CV y el acabado básico, un acabado que ya incluye la pantalla de 10 pulgadas, instrumentación digital, climatizador trizona o sensores de aparcamiento delanteros y traseros. Si quieres una versión diésel tendrás que pagar al menos 50.950 euros, 410 euros menos que la T6.1 de idéntica motorización. Si nos acogemos a las ayudas del Plan MOVES III, la versión enchufable se puede quedar en 48.700 euros.
Las Volkswagen T7 convivirán durante un tiempo con las T6.1. Si quieres una T7, de momento solo podrás comprarla en versión Multivan, que sustituye completamente a las Multivan T6.1 No obstante, las Transporter, Caravelle y California seguirán estando de momento basadas en las ya conocidas T6.1.