Esta semana teníamos algo importante entre manos. Tan importante como el relevo generacional del SEAT Ibiza, el best-seller de SEAT, un producto capaz de mantenerse como el más vendido en España en este primer trimestre de 2017, incluso a sabiendas de que muy pronto una nueva generación del SEAT Ibiza llegará a los concesionarios. En esta primera prueba del SEAT Ibiza nos hemos topado con las virtudes y los defectos de este modelo. Puede parecerse mucho a su predecesor, pero SEAT ha hecho un gran trabajo para conferirle una apariencia de coche de un segmento superior, de la categoría del SEAT León, sin aumentar su longitud. Y lo que es aún más importante, el nuevo SEAT Ibiza ha ganado enteros en espacio interior. Seguimos encontrándonos con un coche con buenos ajustes, aunque más adelante ya os iré contando por qué algunos detalles de su diseño interior no me han convencido tanto. Lo que sí podemos contaros, de momento, en este primer artículo, es cómo y por qué el nuevo SEAT Ibiza se convertirá en la referencia en cuanto a dinamismo, conducción y agilidad, de la categoría.
SEAT Ibiza
La última tecnología del grupo Volkswagen en el nuevo SEAT Ibiza
Lejos quedan aquellos tiempos en los que Audi y Volkswagen podrían reservarse las últimas tecnologías del grupo. La única motivación y la única razón por la que un producto de SEAT, como el nuevo SEAT Ibiza, puede estrenar las nuevas tecnologías del Grupo Volkswagen, es que estas estén listas para su lanzamiento en el momento en que se produzca el relevo generacional o la actualización de un producto. El nuevo SEAT Ibiza, de hecho, será el primero en estrenar lo que en el grupo se ha denominado como la plataforma MQB A0. También será uno de los primeros productos del grupo junto al actualizado Volkswagen Golf en estrenar un motor que, a nuestro juicio, ya es el mejor de Volkswagen, el motor 1.5 TSI EVO de 150 CV de potencia.
La única tecnología que nos parece que SEAT ya debería haber estrenado hace tiempo, y no lo ha hecho, es la instrumentación digital que Audi y Volkswagen comercializan como virtual cockpit y digital cockpit, respectivamente. En cualquier caso ya podemos confirmaros que el SEAT Ibiza estrenará esta instrumentación digital en 2018, y que también estará disponible a partir de entonces en el resto de la gama SEAT, incluidos SEAT Ateca y León.
El SEAT Ibiza estrena la nueva plataforma MQB A0 del Grupo Volkswagen
El verdadero secreto del nuevo SEAT Ibiza se llama MQB A0. En Volkswagen eran conscientes de que a lo largo y ancho de su gama de productos, de diferentes marcas, y de diferentes modelos, existían decenas de productos que tienen muchos aspectos en común, la misma posición y orientación del motor, la misma disposición de la transmisión, etcétera. De manera que aprovechar una base común para todos ellos sería una idea inteligente, que ahorraría muchos millones al grupo y facilitaría la amortización de su desarrollo, así como ayudaría a acelerar el desarrollo de cualquier producto que pudiera construirse derivado de esa plataforma. Es cierto que, en términos de ahorro, el fabricante se beneficiará mucho más que el cliente final de la reducción de costes derivada, puesto que nos guste o no el precio de un coche no lo marca su coste de fabricación, sino el propio mercado. Pero también es cierto que el desarrollo de una plataforma versátil y de calidad en el fondo ha de redundar en un beneficio para el cliente, como veremos de nuestra experiencia en esta primera toma de contacto del SEAT Ibiza.
Cuando en 2012 probamos los nuevos Volkswagen Golf y Audi A3, estos ya equipaban la nueva plataforma MQB. Esta misma plataforma ya está presente en productos que llegan hasta el Volkswagen Passat. Y la plataforma MQB A0 no es otra cosa que una variante de la MQB original optimizada para los pequeños de la casa. Una plataforma con la que el Grupo Volkswagen nos ofrecerá utilitarios más espaciosos, puesto que aumentarán su distancia de ejes y el aprovechamiento del habitáculo, más ligeros, y por ende más ágiles.
La plataforma MQB A0 estará presente en el SEAT Ibiza, muy pronto también el nuevo Volkswagen Polo, en el relevo generacional del Audi A1, e incluso en los crossover de pequeño tamaño, empezando por el SEAT Arona que también conoceremos muy pronto.
El SEAT Ibiza ha crecido y madurado, aunque su longitud sea exactamente la misma
Aunque en apariencia, y a la vista de las primeras imágenes que vimos del SEAT Ibiza, pensásemos que crecería con respecto a su predecesor, la realidad ante la que estamos es que este nuevo SEAT Ibiza tiene virtualmente la misma longitud y altura que el SEAT Ibiza comercializado hasta ahora. Para ser rigurosos, el nuevo SEAT Ibiza es 2 milímetros más corto y 1 milímetro más bajo. Lo que sí ha aumentado significativamente es su anchura, en 87 milímetros. Y de nuevo este punto será sumamente importante en la mejora del espacio interior y la agilidad que hemos percibido en el SEAT Ibiza.
Con esta nueva plataforma y la revisión de sus cotas exteriores, el nuevo SEAT Ibiza ha ensanchado sus vías, 60 milímetros en el eje delantero y 48 milímetros en el eje trasero. Un mundo. También ha aumentado su batalla, su distancia de ejes, en 95 milímetros, alcanzando los 2.564 milímetros. Para que te hagas una idea, eso significa que el nuevo SEAT Ibiza tiene una batalla que está a menos de 4 centímetros de la que emplea el SEAT León SC (3 puertas) y a 7 centímetros de la que emplea el SEAT León de 5 puertas, un Audi A3 Sportback, o un Volkswagen Golf.
Con respecto a un SEAT León, de nuevo, este SEAT Ibiza goza de una anchura de vías en el tren delantero de 1.525 milímetros, 2,4 centímetros menos que el León. Y una anchura en el tren trasero de 1.505 milímetros, 1,5 centímetros menos que el León.
Haz cuentas y verás que, por lo tanto, la plataforma de este nuevo SEAT Ibiza no es tan diferente en sus cotas a la empleada por un SEAT León. Y que, además de todo eso, las masas suspendidas fuera del espacio en el que es deseable que se concentre el peso de un coche, entre sus ejes, son inferiores. Porque el SEAT Ibiza goza de voladizos más cortos.
Con esta nueva plataforma SEAT asegura que el nuevo Ibiza también ha incrementado su rigidez estructural un 30%. Y eso, de nuevo, es una característica deseable para mejorar teóricamente la agilidad del coche.
Técnicamente, sería posible que este SEAT Ibiza contase con versiones de tracción a las cuatro ruedas, o incluso motorizaciones eléctricas o híbridas enchufables. En la práctica es difícil que nos encontremos con tal cosa, en tanto sería difícil de justificar su viabilidad en este modelo. La tracción a las cuatro ruedas, por otro lado, si podría estar presente en el SEAT Arona, un crossover cuya longitud será muy parecida a la de este Ibiza. Y la electrificación llegará en los próximos años a productos como Mii y León.
En nuestra prueba de este nuevo SEAT Ibiza tuvimos ocasión de ponernos a los mandos de dos versiones, la FR, y la nueva XCellence. De momento este será el tope de gama del Ibiza, con una línea FR más enfocada en un diseño y una identidad deportiva, y un XCellence que busca la elegancia. SEAT ofrecerá ambas versiones al mismo precio. Los Ibiza FR e Ibiza XCellence que hemos probado estaban equipados con el nuevo motor 1.5 TSI EVO de 150 CV y el 1.0 TSI de tres cilindros y 115 CV, respectivamente.
De momento no podemos hablaros de precios de estas versiones. El nuevo SEAT Ibiza llega a los concesionarios en junio, con un motor de gasolina tricilíndrico en tres niveles de potencia, el 1.0 MPI y TSI de 75 CV, 95 CV y 115 CV. Con un 1.0 MPI atmosférico de 75 CV y acabado Reference por 14.060€ y dos turbo, el 1.0 TSI 95 CV Reference por 14.700€ y el 1.0 TSI de 115 CV Style por 17.550€. Precios a los que aún habría que restar descuentos y acciones promocionales.
Los diésel llegarán más adelante, a partir del verano, como también hará lo propio el motor que más nos ha gustado, el 1.5 TSI EVO de 150 CV de potencia.
Aunque de motores os hablaré con más detalle más adelante, os adelantaremos algunas cuestiones acerca de los dos motores de gasolina que hemos probado. El 1.0 TSI de 115 CV y tres cilindros es muy correcto, en todos los sentidos, aunque sea más sonoro, y genere algunas vibraciones que pueden ser ostensibles al ralentí. En cualquier caso, es quizás el motor más recomendable de este SEAT Ibiza. Puesto que nuestro motor favorito, el 1.5 TSI de 150 CV de cuatro cilindros, ya dispone de más potencia, y será más caro, que lo hace adecuado para que busque un Ibiza más rápido y deportivo, pero también es más suave, más tecnológico y más agradable de conducir en todos los sentidos.
El 1.0 TSI probado se estira de vueltas mucho, llegando a las 6.500 rpm, a las que corta inyección, un régimen superior al que alcanza el 1.5 TSI EVO. Si bien es cierto, ir más allá de las 5.000 rpm en el 1.0 TSI no tiene sentido, en tanto este motor ha sido concebido para ofrecer una entrega más contundente en bajas y medias, y a partir de esas 5.000 rpm se agota, no empuja más, y solo hace más ruido. El 1.5 TSI EVO no llega a las 6.500 rpm, pero sí que es capaz de seguir empujando con fuerza por encima de las 5.000 rpm y además es más contundente en bajas que su predecesor, el motor 1.4 TSI. Eso hace de este motor una opción muy agradable para aquellos que, sin pensar ya en un Cupra, queremos disfrutar conduciendo un Ibiza en el entorno de los 150 CV de potencia, y disfrutar cada marcha, estirándolas muy arriba.
Nada más ponernos a los mandos de este SEAT Ibiza ya nos vamos percatando de que su tacto, en general, es el esperado. No te imagines que te vas a encontrar con una dirección o un chasis muy firme, muy radical, ni tan siquiera en el FR. Sino con un compromiso correcto entre la deportividad que esperamos, por ejemplo con una dirección suficientemente pesada y directa, y el confort, especialmente aprovechando los modos de conducción SEAT Drive Profile que equipan de serie ambas versiones.
El toque diferencial, y el gran avance de este SEAT Ibiza que ya hemos analizado en la teoría, lo apreciamos en la práctica cuando empezamos a tomar curvas. En este SEAT Ibiza es muy sencillo inscribirse en una curva, corregir la trayectoria, cambiar de dirección, etcétera. Su forma de apoyarse en la curva y de traccionar al salir de ella es muy parecida a la que hemos experimentado en el SEAT León. Su estabilidad y la sensación de control que tenemos en todo momento también es propia de un SEAT León.
En el caso del SEAT Ibiza FR aún apreciamos mejor esa capacidad de tracción, en tanto está equipado con el XDS, que ciertamente no es un diferencial, pero sí una lógica de funcionamiento para el ESP que nos ayuda a traccionar mejor. Pensad que este sistema se encarga de reducir el giro de una rueda aplicando automáticamente los frenos, para corregir nuestra trayectoria y evitar el subviraje. Pero en la práctica, en condiciones de conducción deportiva, ciertamente se comporta mejor y es menos intrusivo que otros controles de tracción y estabilidad convencionales.
Existen situaciones muy concretas en las que este tipo de utilitarios, del segmento B, tienden a facilitar una pérdida de control del coche, por ejemplo cambios de dirección bruscos. Por su altura, y su escasa longitud en proporción, por ejemplo con un compacto del segmento C, es relativamente sencillo desestabilizarlos a la entrada de una curva, girando el volante levemente en contra del giro de la curva, para girar bruscamente a favor más adelante. Esta práctica, poco recomendable si el conductor no tiene experiencia, es además muy divertida en conducción deportiva. Y lo normal en un utilitario como este es que deslice de atrás, incluso en configuraciones firmes y deportivas, como la que emplearía un Cupra.
Incluso forzando al límite a este SEAT Ibiza, nos ha costado, y mucho, conseguir que se desestabilizase. Casi tanto como nos hubiera costado con un coche del segmento superior, con un SEAT León. Y esto es de nuevo una constatación de que este SEAT Ibiza está más próximo a la conducción que nos ofrece un compacto muy correcto en su categoría como el León, que a la conducción del antiguo Ibiza, y de otros utilitarios del segmento B. Y la constatación de que muy probablemente estemos ante la referencia en conducción en su categoría, a menos que las últimas incorporaciones, que aún no hemos probado, como el nuevo Ford Fiesta, nos demuestren lo contrario.
De momento, y tras una toma de contacto rápida que completaremos con pruebas más a fondo en las próximas semanas, esto es todo lo que podemos contaros al respecto de su dinámica y su plataforma MQB A0. Aunque ya os adelantamos que aún hay mucho que contar al respecto de otros puntos clave de este nuevo SEAT Ibiza, como tecnología, espacio, practicidad y calidad percibida.
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