La espera ha terminado: Skoda ha desvelado, por fin, todos los detalles de la cuarta generación del Skoda Fabia, su modelo utilitario, que llega completamente renovado con un diseño más atractivo y elaborado, un interior mucho más moderno y una carga tecnológica inédita en el modelo checo. ¿Qué esconde la nueva generación del Skoda Fabia? Lo analizamos en cuatro claves.
Skoda Fabia
Con más de 4.5 millones de unidades comercializadas desde que se lanzase al mercado en 1999, el Skoda Fabia es un modelo básico, fundamental para Skoda. De hecho, es el segundo Skoda más vendido de la historia, sólo superado por el polivalente Skoda Octavia. Por eso, la gente de la firma checa se ha tomado su tiempo a la hora de actualizar concienzudamente al Skoda Fabia, que llega -en los próximos meses- cargado de novedades que hacen de él uno de los utilitarios más interesantes del momento.
No es para menos: el segmento B está en plena ebullición, con lanzamientos de altísimo nivel. Así pues, el nuevo Skoda Fabia se las tendrá que ver con modelos como el Peugeot 208, el Volkswagen Polo o el SEAT Ibiza.
El diseño del nuevo Skoda Fabia es mucho más atractivo
Skoda ha renovado completamente al Skoda Fabia: la cuarta edición del urbano no comparte ni una sola pieza con su antecesor, aunque está claro que, ya con un simple vistazo, podemos calificar la renovación estética del Skoda Fabia como de «evolución», ni mucho menos de «revolución«. Los trazos ahora son más redondeados, más «amables» incluso dependiendo del ángulo desde el que lo miremos.
La parrilla es más grande y los grupos ópticos más afilados, más al «estilo Skoda Octavia«, mientras que si nos fijamos en el lateral nos encontramos con trazos musculosos, con una cintura más elevada, una sensación que se refuerza gracias a una superficie acristalada que en esta nueva generación «se mueve» de manera mas fluida.
En la parte posterior, por su parte, el Skoda Fabia 2021 adopta unos grupos ópticos mucho más parecidos a los de los últimos Skoda, de manera que por primera vez el Fabia contará con pilotos partidos entre la aleta y el portón del maletero. El nuevo Fabia mide ahora 4.11 metros, 11 cm más que antes, contando además con una mayor distancia entre ejes de 2.56 metros, creciendo 9 cm en ésta medida. El Fabia podrá instalar por primera vez llantas de hasta 18 pulgadas.
Un interior revolucionario para el Skoda Fabia
Si hemos dicho antes que la carrocería del Fabia se puede calificar como de «evolución»; en el interior sí podemos afirmar, sin temor a equivocarnos, que estamos ante una gran «revolución». Adiós a los trazos rectos, a las superficies casi «cuadriculadas» y las líneas serias y formales de sus antecesores. El nuevo Skoda Fabia adopta así un salpicadero mucho más moderno, más en línea con modelos como el nuevo Skoda Octavia o, haciendo honor a la verdad, muy parecido al que acaba de estrenar el actualizado SEAT Ibiza.
Así pues, Skoda juega ahora con un salpicadero en dos niveles, con una plancha superior con una superficie aparentemente acolchada y «texturizada» y una parte media con molduras decorativas de tipo textil que aportan un extra de calidez al conjunto. El color juega ahora un papel fundamental, con molduras decorativas de diferentes tonos en salpicadero y puertas.
La modernidad es evidente, con elementos como una nueva pantalla de infoentretenimiento de hasta 9.2 pulgadas situada mucho más arriba que hasta ahora, interactuando con una instrumentación digital que hasta ahora el Fabia nunca había instalado. Sin embargo, Skoda ha decidido mantener ciertos mandos -como los del sistema de climatización- en formato físico, una decisión que desde aquí aplaudimos.
El Skoda Fabia puede instalar también un gigantesco techo panorámico de cristal que aumenta aún más la sensación de amplitud de un interior ya de por sí muy amplio, porque ojo a la capacidad del maletero del nuevo utilitario de Skoda: nada más y nada menos que 380 litros, la misma capacidad que todo un Volkswagen Golf.
El Skoda Fabia más tecnológico
Skoda ha decidido dotar al Skoda Fabia con una muy generosa carga tecnológica. De esta manera, la cuarta generación del urbano checo equipará, de serie, iluminación LED tanto delante como detrás, aunque se podrá optar por una iluminación más elaborada y avanzada. Además, gracias a la adopción de la plataforma modular MQB-A0, el Fabia podrá salir de fábrica «cuajado» de sistemas y asistentes de seguridad.
Entre ellos, no faltarán por ejemplo los asistentes de luces de carretera, el sistema Lane Assist de mantenimiento de carril, el sistema de frenada de emergencia Front Assist o el sistema de asistencia de aparcamiento Park Assist. Muchos de ellos, además, se podrán englobar en el Travel Assist para que el Skoda Fabia pueda comportarse de manera «semi-autónoma» en ciertos escenarios de conducción como las vías rápidas.
El Skoda Fabia de cuarta generación ofrecerá de serie seis airbags, aunque de manera opcional se podrá equipar, a mayores, un airbag de rodillas para el conductor y airbag laterales para los ocupantes de las plazas traseras.
Vuelven los cuatro cilindros al Skoda Fabia
La gama de motores del Skoda Fabia estará compuesta por bloques únicamente de gasolina de tres y -de nuevo- de cuatro cilindros. Así pues, siendo todos los motores parte de las familias EVO, el Skoda Fabia ofrecerá como motor de acceso un 1.0 MPI con 65 y 80 CV, asociados a una caja de cambios manual de 5 velocidades.
Por encima encontramos al 1.0 TSI, con dos niveles de potencia: 95 y 110 CV. El primero contará con una caja manual de 5 velocidades, mientras que la versión más potente contará con una caja de cambios manual de 6 relaciones y, de manera opcional, una automática DSG de 7 relaciones.
El tope de gama corresponde al bloque 1.5 TSI de 150 CV con desactivación de cilindros, únicamente disponible con caja de cambios automática de 7 velocidades -también DSG- con el que el Skoda Fabia consigue firmar unas prestaciones más que destacables, con una aceleración de 0 a 100 km/h en menos de 8 segundos. Eso sí, no existirá ningún tipo de hibridación en la gama, por lo que todos los Skoda Fabia que lleguen a nuestro país contarán con la etiqueta C de la DGT.