Por muy diferentes que puedan llegar a ser los gustos y necesidades del grueso del público que compone los distintos mercados del mundo, los coches que más éxito obtiene a nivel global tienen en común que se comercializan en prácticamente cada rincón del planeta. No obstante, el que es el tercer turismo más vendido del mundo no obtiene un éxito tan arrollador en nuestro país como sí lo tiene a nivel global, ya que aquí apenas se le presta atención y por ello obtiene resultados comerciales discretos.
Se trata de un SUV que por tecnología, tipo de carrocería y tamaño rivaliza directamente con el Toyota RAV4, que es el segundo modelo más vendido del mundo, justo por delante del que precisamente queremos destacar con estas líneas: el Honda CR-V.
Claves del Honda CR-V
- En 2023 fue el tercer coche más vendido del mundo con más de 846.000 unidades matriculadas
- Su rival más directo es el Toyota RAV4, que, con 1.076.000 unidades, fue el segundo más vendido del mundo
- No es el más llamativo por diseño, pero por su calidad de construcción es una referencia
- La división española de Honda lo tiene a la venta en nuestro país, aunque no es barato
Imágenes del Honda CR-v (exterior)
Honda CR-V
Y es que, con sus 4,71 metros de longitud, unas mecánica híbrida e híbrida enchufable, un sobrio pero minimalista diseño japonés tanto en su exterior como en su interior y un maletero de entre 588 y 635 litros, el Honda CR-V es punto por punto la mejor alternativa que podemos considerar a la hora de valorar la compra de un Toyota RAV4.
Como con todo coche a la venta, no se trata de un modelo perfecto, y en este caso el mayor freno a la compra del CR-V lo encontramos en su precio de partida, ya que comparando las versiones básicas con motorización híbrida convencional de cada modelo hay una diferencia de precio de más de 8.000 euros: el Toyota RAV4 parte de 40.500 euros y el Honda CR-V hace lo propio en 48.145 euros. Ambos precios teniendo en cuenta los descuentos que en estos momentos ofrece cada marca, de 3.000 y 3.400 euros, respectivamente.
No obstante, existen motivos que justifican en gran medida el sobreprecio del CR-V, y es que la versión que representa el acceso a su gama, denominada Elegance, se serie ya viene prácticamente equipada al completo. Tiene elementos poco comunes en una versión de acceso como techo solar panorámico practicable, portón del maletero eléctrico, volante calefactable, cargador para el teléfono por inducción o faros de led.
De hecho, para tener elementos como el cargador inalámbrico o el techo panorámico en el RAV$, se ha de dar el salto al nivel de equipamiento Luxury, que parte desde 48.800 euros, disipando en gran medida el abismo que, a priori, hay entre ambos, aunque el modelo de Toyota sigue desmarcándose, por ejemplo, en cuanto a potencia, pues rinde 218 CV por los 184 del CR-V, traduciéndose esto en una aceleración más contundente. Hace el 0 a 100 en 8,4 segundos y el CR-V en 9 segundos.
Uno de los grandes reclamos de este tipo de coches reside en que, aunque se trata de coches de gran tamaño para los estándares europeos, por sus mecánicas híbridas brindan consumos realmente contenidos. En este sentido, ambos se emplazan dentro de los mismos rangos de gasto de gasolina, con 5,9 litros homologados para el CR-V y 5,8 para el RAV4.
Otra de las grandes bazas del CR-V frente al RAV4 está en su interior, donde los años empiezan a pasar factura al modelo de Toyota. El de Honda, por su parte, tiene un diseño más minimalista y acorde a lo que se espera de un coche actual, con una calidad de materiales y ajustes de alta calidad, sin llegar a entrar dentro del terreno de los premium.
Imágenes del interior del Honda CR-V
El único defecto que se puede encontrar aquí al CR-V con respecto al RAV4 reside en su sistema de información y entretenimiento, que es muy completo pero no tiene una gran pantalla ni unos gráficos a la última como sí tiene el Toyota.
Para acabar, por encima de las variantes híbridas convencionales quedan las híbridas enchufables, con el RAV4 partiendo desde 48.500 euros y el Honda en nada menos que 61.760 euros. Aquí, por la diferencia de precio, salvo casos puntuales o excepciones, es prácticamente imposible justificar la compra del CR-V, ya que tampoco ofrece una autonomía eléctrica muy superior con 81 kilómetros con una carga completa sobre los 75 del RAV4.
Imágenes del Honda CR-V (galería completa)
