Todo un cohete de bolsillo. Ante ustedes, el nuevo Volkswagen up! GTI. Es el coche más pequeño de la marca en llevar las tres míticas siglas, y las comparaciones con la primera generación del Volkswagen Golf GTI están tardando en sucederse. Aunque lleve las siglas GTI, más que un cohete de bolsillo es un divertido juguete, de prestaciones más que correctas, sin llegar a ser tan radical como los Abarth 595 o los Opel Adam S, con potencias cercanas a los 150 CV. El Volkswagen up! GTI es también el primer GTI de la marca en montar un motor de tres cilindros. ¿Qué más esconde este GTI de bolsillo?
Para empezar, ha sido agraciado con un dinámico kit de carrocería, que replica la fórmula GTI de sus hermanos mayores. En su pequeña calandra tienen un lugar protagonista las tres míticas siglas: «Gran Turismo Inyección». Los paragolpes están cuajados de tomas de aire y el coche posee un aire agresivo, entre otros motivos gracias a unas llantas de 17 pulgadas – disponibles en varios diseños. En la zaga tenemos una sencilla cola de escape cromada, así como una pequeña franja roja, a juego con el color de las pinzas de freno. Un discreto vinilo longitudinal recorre la parte inferior de las puertas.
Volkswagen e-up!
No sabemos si estará disponible en carrocería de cinco puertas, pero sí sabemos que de momento este coche es un prototipo muy, pero que muy cercano a la producción en serie. Será la estrella del Wörthersee Tour de Volkswagen, una reunión anual en Austria para los más quemados del universo Volkswagen. El up! GTI también sigue la tradición de sus hermanos mayores en el habitáculo, donde están presentes unos asientos con tapicería de tela a cuadros, un volante deportivo y un salpicadero con un esquema de colores llamado «Red Pixel». Es un toque deportivo relativamente discreto, pero suficientemente diferente de otros up!.
En lo tocante a su mecánica, el Volkswagen up! GTI es sencillo: nada de complejos diferenciales, potencias absurdas, suspensiones adaptativas o frenos carbonocerámicos. Su motor es un sencillo 1.0 TSI de 115 CV – que podemos encontrar en los Skoda Karoq o SEAT Ibiza – y 200 Nm de par motor máximo a 2.000 rpm. Esta potencia pasa al tren delantero a través de una caja de cambios de seis relaciones bastante cerradas. Gracias a un peso en orden de marcha de sólamente 997 kilogramos, consigue hacer el 0 a 100 km/h en sólamente 8,8 segundos, con una velocidad máxima de unos más que respetables 197 km/h.
No son las prestaciones de un Abarth 595, pero son comparables a las de un Volkswagen Golf GTI de primera generación. El motor 1.0 TSI lo he probado ya en varios coches, y sorprende por su progresividad y lo bien que se estira, cortando inyección a más de 6.500 rpm. Es un buen tricilíndrico, aunque no tenga el refinamiento de un 4-en-línea. En lo tocante a su tren de rodaje, su suspensión se ha rebajado en 15 mm con respecto al resto de Volkswagen up! y recibe una puesta a punto deportiva. Su esquema delantero es McPherson y su eje trasero es rígido. Es una configuración sencilla, de nuevo idéntica a la del primer Volkswagen Golf GTI.
Lo que me gusta del up! GTI es su sencillez y su pureza: nada de modos de conducción, nada de complejidades innecesarias. Es muy ligero, tiene una potencia correcta y será muy divertido. Más que un rival para los Abarth 595 será una alternativa ideal para coches como el Renault Twingo GT o el smart forfour Brabus, ambos con 110 CV de potencia y prestaciones algo más modestas. Con una buena puesta a punto, el up! GTI puede convertirse en todo un homenaje a aquellos GTI de antaño, ligeros y divertidos. Esperamos que Volkswagen consiga mantener su precio por debajo de los 18.000 euros una vez llegue a las calles.