El Mercedes Clase B es un monovolumen fabricado por Mercedes-Benz desde 2005. Actualmente se comercializa la tercera generación, presentada en 2018. El Mercedes Clase B se caracteriza por pertenecer a la línea más compacta de la marca alemana. Es un modelo cómodo, fácil de conducir y muy práctico para aquellos que necesitan un coche con espacio y capacidad de carga. Se fabrica en la planta de Rastatt (Alemania).
Entre los monovolúmenes medianos que aspiran a rivalizar con el Mercedes Clase B nos encontramos con rivales entre los que destacan el BMW Serie 2 Active Tourer.
Diseño exterior del Mercedes Clase B
El Mercedes Clase B es un monovolumen que mide 4,419 metros de largo, 1,796 de ancho y 1,562 de alto. Tiene, además, una distancia entre ejes de 2,729 metros. Cuenta con cinco niveles de equipamiento (Estándar, Style, Progressive, AMG Line y Night) y está asentado sobre la misma plataforma que el Mercedes Clase A.
No obstante, el Mercedes Clase B es más alto, más ancho y más espacioso. Se trata de un monovolumen con líneas suaves y fluidas y un toque deportivo. En el frontal presume de una parrilla estilizada enmarcada por unos alargados faros que pueden contar con la tecnología Multibeam-LED. La zaga, por su parte, apuesta por grupos ópticos LED y un paragolpes con las características molduras inferiores de la firma.
Gama de motores del Mercedes Clase B
La oferta mecánica del Mercedes Clase B se divide en tres opciones: gasolina, diésel e híbrido enchufable.
Las versiones de gasolina están equipadas con un motor de 1.3 litros que ofrece dos niveles de potencia: 136 (B180) y 163 CV (B200). Ambas opciones pueden asociarse a un cambio de marchas manual o automático.
Las diésel cuentan con un 2.0 que puede desarrollar 116 (B180d), 150 (B200d) o 190 CV (B220d). Todas van de la mano de una trasmisión automática de siete u ocho velocidades y la B220d es la única que ofrece tracción en las cuatro ruedas: el resto envía la potencia al tren delantero.
Interior del Mercedes Clase B
Este monovolumen de cinco plazas tiene un habitáculo que, en parte, recuerda al del Mercedes Clase A aunque en este caso es mucho más espacioso y práctico: no en vano, la segunda fila es deslizable y los respaldos son ajustables. La capacidad de carga de su maletero es de 445 litros o de 1.530 si se abate la banqueta trasera.
El salpicadero del Mercedes Clase B destaca por sus materiales de calidad, su moderno aspecto y su avanzado equipamiento tecnológico que puede llevar. El cuadro de instrumentos puede ser de 7 o 10,25 pulgadas y la pantalla central está equipado con el sistema MBUX de la marca.
Dinámica del Mercedes Clase B
El Mercedes Clase B es un coche concebido para satisfacer a todos los conductores que buscan un modelo espacioso y fácil de conducir. Tiene muy buena visibilidad, el habitáculo está bien aislado y los motores destacan por su eficiencia. En acción, el monovolumen ofrece un correcto equilibro entre confort y agilidad destacando por tener un dinamismo impropio de su segmento: su suspensión filtra bien las imperfecciones del asfalto y cuando tiene que enfrentarse a carreteras más complicadas no es tan ágil como el Mercedes Clase A, pero tampoco resulta torpe.
Versiones del Mercedes Clase B
El Mercedes Clase B tiene una versión híbrida enchufable: el Mercedes Clase B250e. Está impulsado por un motor de gasolina (el mismo que podemos encontrar en el B200, pero con cambios en el sistema de escape) y otro eléctrico de imanes permanentes que aporta 102 CV: juntos desarrollan una potencia de 218 CV y un par máximo de 450 Nm.
La batería de iones de litio tiene una capacidad bruta de 15,6 kWh que promete una autonomía, según el Ciclo WLTP, de 61-70 kilómetros en función del equipamiento. Mercedes la ha situado en el hueco destinado al depósito, que ahora va sobre el eje trasero: de esta manera, el maletero del Mercedes Clase B no pierde capacidad y mantiene sus 445 litros.