El Honda Civic que tenéis en pantalla no es un Honda Civic cualquiera. Es el coche de tracción delantera y chasis de serie más rápido del planeta, con una potencia de nada menos que 1.850 CV. Su motor de dos litros sobrealimentado por un enorme turbocompresor no guarda similitudes con un propulsor de serie y todo su tren de rodaje ha sido preparado para la absorción de enormes cantidades de par motor. La pericia del conductor y esos enormes slicks de drag racing evitan las pérdidas de tracción.
Con un cuarto de milla en 7,6 segundos – entrando en meta a 319 km/h – es casi tan rápido como cierto Nissan GT-R de Bahrein, con mucha más potencia y tracción integral. Puede que este Civic no tenga una salida tan fulgurante, pero en cuanto logra un nivel correcto de tracción, es simplemente intratable.